Una denuncia del gobierno de Basher Assad y una afirmación del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (pro oposición) echaron luz sobre posible presencia de tropas francesas y alemanas en terreno sirio, algo que por ahora ha desmentido Berlín.

Damasco denunció la presencia de "fuerzas especiales" francesas y alemanas en dos zonas del norte de la provincia de Alepo, lo que calificó de "violación a su soberanía". Una fuente del Ministerio sirio de Asuntos Exteriores dijo que estos efectivos se encuentran en las áreas de Kobani y Manbech. "Siria condena esta flagrante intervención que supone una fuerte violación a los principios y propósitos de la carta de la ONU y una franca agresión a la soberanía e independencia de Siria", subrayó.

Lo mismo sostuvo el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. "Según fuentes fiables, asesores militares alemanes, franceses y estadounidenses estás apoyando a las FSD (la coalición kurdo-árabe Fuerzas Democráticas Sirias) contra el Estado Islámico". El Observatorio afirmó que los franceses estarían construyendo una base militar cerca de Kobane -localidad casi sobre la frontera con Turquía y que resistió al asedio de los combatientes del Estado Islámico- y que la mayoría de los asesores se encuentran en el área de la presa de Teshrin, en el río Eufrates y al sureste de Manbech.

También el Observatorio detalló que los militares alemanes son asesores militares y no fuerzas especiales, e indicó que en Alepo hay además asesores y fuerzas especiales de Francia y EE.UU., que ayudan a las FSD en la zona de Manbech.

De acuerdo con la agencia Reuters, Alemania, que apoya con armas y asesoramiento a las fuerzas kurdas Peshmerga en Irak, niega estar brindado similar soporte en Siria.

Hace cuatro días, el portavoz de FSD, Talal Salu, dijo a la agencia española Efe que expertos militares franceses entrenan y asesoran a estas tropas en la lucha contra el Estado Islámico (EI).  El portavoz, que no aludió a la presencia de asesores alemanes, indicó que los franceses no participan en operaciones de combate, sino que solo ayudan a las FSD en "labores de planificación y de estrategia".

Las FSD lanzaron una ofensiva contra el Estado Islámico en el norte de la provincia de Raqa, el bastión principal de esos extremistas en Siria, y entrega respaldo a otras facciones sirias en Manbech, controlada por los radicales, y en el noreste de la provincia de Alepo.