Día de la madre

SEÑOR DIRECTOR:
A veces me preguntan si tengo hijos. Y nunca sé bien qué contestar, aunque casi siempre digo que sí: una niña, mi Sofía.
No suelo entrar en detalles, pero sé que con esa respuesta vienen más preguntas. “¿Y ahora está con el papá?”, me dijo un taxista hace algunos días. “Sí, sí”, respondí, casi sin voz, aunque Sofía se fue hace algunos meses.
Esa conversación -que aparece cada tanto con conocidos que no he visto en mucho tiempo (a quienes termino diciendo de golpe que mi niña partió de este plano), o con desconocidos (a quienes mayoritariamente les miento)- me enfrenta a una reflexión inevitable:
¿Sigo siendo madre, aunque ella ya no esté? Convivo con la dureza de esa sensación de haber tenido algo inmenso y haberlo perdido, como si simplemente hubiera desaparecido. Y me pregunto cómo lo hacían, qué decían nuestras abuelas, y las madres de ellas.
Espero que el paso del tiempo me enseñe a responder mejor. Que me dé más claridad, más certezas. Pero, sobre todo, que me permita incorporar -en todos los ámbitos- que la maternidad es un lazo indisoluble, aunque aún no se haya inventado la palabra que redefina esta relación infinita con mi hija.
Carolina Araya
Periodista
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
2.
3.
4.
Contenido y experiencias todo el año🎁
Promo Día de la MadreDigital + LT Beneficios $3.990/mes por 6 meses SUSCRÍBETE