Una vez al año nos gusta hacer un número que para nosotros es de lujo, en él tocamos temáticas que generalmente no van en la revista y jugamos con el glamour y el allure del mundo de la noche, los brillos y la sofisticación. Generalmente es en diciembre, porque es el mes de celebración por definición y todos estamos un poco más abiertos a ser lúdicos.

Para la edición de este año buscamos casas especiales, que reflejaran el espíritu de vivir bien, de manera sofisticada y con espacios de los que uno nunca quisiera salir. Y alguien que sin duda copó esta descripción es el interiorista Jorge Fuentes; instalado hace pocos meses en Santiago, puso todo su gusto y experiencia en uno de los nuevos departamentos del edificio Isidora 3000. En un acotado espacio muy bien pensado, con muebles en terminaciones que normalmente no se encuentran en Chile, como piel de mantarraya o maderas exóticas.

Si a esto sumamos un uso casi compulsivo de tecnología (todo el departamento se controla desde el iPhone, temperatura, luces, sonido, etc.) el resultado solo puede sorprender. Sin duda que esta es solo la primera muestra de los proyectos que esperamos publicar a futuro.

También en esta edición, dos placeres culpables: dormir envuelto por las mejores sábanas existentes y tomarse un trago como Dios manda. Aunque no todos lo hagamos, es bueno saber que existe la posibilidad si uno tiene ganas, por eso damos las pautas de qué y dónde comprarlo.

A pesar de que todo el número gira en torno al lujo, la idea que quisimos graficar es que uno puede pasarlo bien sin necesariamente tener que poner muchos 0 a la derecha. Es el lujo MásDeco, más entretenido, divertido y donde lo más importante es con quien se hacen las cosas y no cuánto cuesta hacerlo. Disfrútenlo, a veces darse un gusto es la recompensa que nos merecemos.