Durante la fiesta de inauguración de la nueva casa de Luis Alonso en Barcelona -ubicada en el barrio El Putxet- cada uno de los 150 invitados recibió un dossier de regalo titulado “En casa de herrero, cuchillo de palo”, con más de 200 planos dibujados a mano por el propio arquitecto y socio fundador de Alonso Balaguer Arquitectos Asociados.

Y la ocasión lo ameritaba, mal que mal esta es la casa definitiva y en su proyección nada quedó al azar, “por las noches me di el lujo de ir esbozando detalle a detalle”, relata Luis. “Mi señora, con su extraordinaria paciencia, me dejó diseñar esta casa totalmente solo y pude desarrollar teorías que por mucho tiempo venía estudiando”.

De una de estas teorías surgió la idea de una construcción vertical y transparente, que ha provocado incluso “algunos problemas de vértigo” entre las amigas de su hija de once años, que visitan esta casa por primera vez, cuenta como anécdota este arquitecto.

Cada uno de los seis pisos y techos son traslúcidos, permitiendo una total comunicación visual entre quienes la habitan, un aspecto que se observa desde el exterior, pasando por elmobiliario y la arquitectura; unificando y fortaleciendo la propuesta de Luis, “la alegría del color forma parte de nuestras vidas”.

Muchos de los gustos de este arquitecto se traspasaron a la casa y es así como música y fotografía se manifiestan con sólo apretar el interruptor de la luz por la mañana. Más de 15 mil imágenes y alrededor de veinte horas de títulos musicales se oyen y observan a través de parlantes y plasmas ubicados estratégicamente en cada una de las plantas. “Como ves, integro muchos de mis vicios a mi diario vivir”, cuenta.

• Uno de los lugares más aprovechados por los dueños de casa es la cocina, especialmente cuando convidan a amigos los fines de semana.
• A cada piso de la casa se le proporcionó una tonalidad particular, excepto la planta de su hija de 11 años, que reúne una amplia gama de colores con la intención de que desde pequeña se aficione al color.