Si los relojes, las zapatillas o las Biblias de Donald Trump no fueran suficientes, la empresa familiar acaba de añadir otro producto para demostrar el apoyo de sus partidarios al presidente estadounidense: teléfonos móviles.

La Organización Trump anunció el lanzamiento de un servicio de telefonía celular llamado T1 Phone por Trump Mobile, que costará 47,45 dólares al mes e incluirá llamadas, mensajes de texto y datos ilimitados. Se espera que compita con proveedores de telecomunicaciones estadounidenses como AT&T, Verizon y T-Mobile, que dominan el mercado de telefonía móvil en el país y que ofrecen servicios telefónicos a partir de menos de 40 dólares al mes.

También planea lanzar un nuevo teléfono de 499 dólares que se fabricará en EE.UU. Una imagen del teléfono muestra un dispositivo dorado con la frase “Make America Great Again”. Sin embargo, el nuevo teléfono inteligente anunciado por la Organización Trump probablemente será hecho en China, dicen los expertos, a pesar de las afirmaciones de que el dispositivo se fabricará en Estados Unidos.

El nuevo servicio se diseñó para coincidir con el décimo aniversario del anuncio de Donald Trump sobre su primera candidatura presidencial, según informó la Organización Trump en un comunicado el lunes.

“Una gran parte de lo que hemos hecho (…) se ha centrado en la tecnología para las personas que han sido desatendidas, ya sea en cripto o cualquier otra cosa, pero uno de los lugares donde sentimos que había un rendimiento mediocre fue en la industria móvil”, dijo Donald Trump Jr. el lunes en un evento en la Torre Trump en Nueva York.

“Con Trump Mobile, vamos a presentar un paquete completo de productos donde la gente podrá acceder a telemedicina en sus teléfonos por una tarifa mensual fija, asistencia en carretera en sus autos (a través de Drive America) y mensajes de texto ilimitados a 100 países de todo el mundo”, afirmó el hijo del mandatario republicano.

“Estoy sumamente emocionado de adentrarme en este nuevo espacio digital. Los estadounidenses que trabajan duro merecen un servicio móvil asequible, que refleje sus valores y ofrezca una calidad confiable en la que puedan confiar. Nos enorgullece especialmente ofrecer llamadas de larga distancia gratuitas a nuestros militares y sus familias, ya que quienes prestan servicio en el extranjero deben poder mantenerse siempre conectados con sus seres queridos en casa”, comentó Eric Trump, vicepresidente ejecutivo de la Organización Trump.

“Trump Mobile va a revolucionar el mercado. Nos basamos en el movimiento de poner a Estados Unidos primero y ofreceremos la más alta calidad y servicio. Nuestra empresa tiene su sede aquí mismo, en Estados Unidos, porque sabemos que es lo que nuestros clientes quieren y merecen”, destacó Donald Trump Jr. “No estás llamando a centros de llamadas en Bangladesh”, dijo su hermano Eric a Fox Business en una entrevista el lunes. “Lo estás haciendo directamente desde St. Louis, Missouri”.

Pese a que la Organización Trump afirma que el teléfono se fabricará en Estados Unidos, los expertos señalan que probablemente fue diseñado y fabricado por una empresa china. “Es imposible que el teléfono se haya diseñado desde cero y que se ensamble o fabrique completamente en EE.UU.”, declaró Francisco Jerónimo, vicepresidente de International Data Corp., a la CNBC el martes. “Eso es completamente imposible”.

Jerónimo sugirió que el teléfono probablemente sería producido por un fabricante original de dispositivos chino (ODM), un tipo de empresa que diseña y fabrica productos según las especificaciones de otra firma.

“A pesar de anunciarse como un teléfono de fabricación estadounidense, es probable que este dispositivo sea producido inicialmente por un ODM chino”, declaró Blake Przesmicki, analista de Counterpoint Research, en una nota el lunes.

Jeff Fieldhack, director de investigación de Counterpoint Research, añadió que “EE.UU. no dispone de capacidad de fabricación local disponible”.

De hecho, Eric Trump dijo en el podcast “The Benny Show”: “Con el tiempo, todos los teléfonos podrán fabricarse en los Estados Unidos de América”, lo que sugiere que los teléfonos lanzados en agosto podrían no ser fabricados íntegramente en el país.

La fabricación de teléfonos inteligentes cobró protagonismo después de que Trump amenazara con imponer aranceles a los dispositivos importados a Estados Unidos. Si bien estos aún no se han materializado, el presidente republicano ha puesto bajo la lupa la cadena de suministro de Apple, instando al fabricante del iPhone a trasladar la producción de su teléfono insignia desde China e India a Estados Unidos. Esta petición forma parte de un deseo más amplio de Trump de que se realice una mayor fabricación de productos electrónicos en Estados Unidos, indicó CNBC. El mes pasado, el presidente amenazó con imponer un arancel del 25% a los productos de Apple si el gigante informático no repatriaba parte de su producción.

Si Apple fabricara sus iPhones en Estados Unidos, costarían alrededor de 3.500 dólares cada uno, más del triple de su precio minorista actual de alrededor de 1.000 dólares, debido al mayor costo de fabricación en ese país, dijo el analista de Wedbush, Dan Ives.

La Organización Trump anunció que Trump Mobile lanzaría su propio teléfono, el “T1”, en agosto, el producto de consumo más reciente con la marca Trump. Sin embargo, el sitio web de Trump Mobile afirma que el teléfono debutará en septiembre. El dispositivo, que contará con sensor de huellas dactilares y capacidad de desbloqueo mediante reconocimiento facial, incluirá 256 GB de almacenamiento interno y 12 GB de RAM. Utiliza el sistema operativo Android.

Trump Mobile es el último de una serie de acuerdos con la familia Trump, firmados o acelerados tras su segundo mandato, incluyendo una moneda digital que ahora constituye una fuente importante de su riqueza. El mandatario recaudó millones de dólares el año pasado en hoteles y clubes de golf de su marca, así como en la venta de una amplia gama de productos, como una Biblia, relojes, zapatillas deportivas y una guitarra.

Expertos en gobernanza han señalado que estos proyectos plantean una serie de conflictos de intereses sin precedentes para un presidente estadounidense, consignó The New York Times. “Es increíble que la familia Trump haya creado otra forma para que el presidente Trump se beneficie personalmente mientras ejerce el cargo”, dijo Meghan Faulkner, directora de comunicaciones de Ciudadanos por la Responsabilidad y la Ética en Washington, en declaraciones a la BBC.

En la declaración financiera del presidente, publicada el viernes, se reportaron más de 600 millones de dólares en ingresos provenientes de acuerdos de licencia, proyectos de criptomonedas, clubes de golf y otras empresas. Estas cifras parecían corresponder a finales de 2024, antes de su segunda investidura presidencial. Desde entonces, tan solo los proyectos de criptomonedas de la familia Trump han generado cientos de millones de dólares, según los términos de venta publicados por las entidades relacionadas con el sector.

La revista Forbes estimó en marzo su patrimonio neto en 5.100 millones de dólares, más del doble que el año anterior. Añadió que el aumento se debió en parte a los seguidores incondicionales del presidente, a quienes se les atribuye haber ayudado a impulsar el valor de la empresa de redes sociales de Trump, que gestiona la plataforma Truth Social, y que representó aproximadamente la mitad de su patrimonio el año pasado.

“Nadie que haya estado atento podría pasar por alto que el presidente Trump considera la presidencia un vehículo para aumentar la riqueza de su familia. Quizás este ejemplo ayude a más personas a comprender esta verdad innegable”, dijo Lawrence Lessig, profesor de derecho en la Facultad de Derecho de Harvard.

Reuters recordó que la Organización Trump ha sufrido una serie de fracasos empresariales relacionados con las licencias, incluyendo Trump Vodka, Trump Steaks, Trump Mattresses, Trump Ice y la Universidad Trump. En tanto, The Associated Press agregó que la compañía Trump intentó captar el apoyo de la clase media durante su primer mandato con dos cadenas hoteleras de gama media, American Idea y Scion, pero fracasaron.