El ministro de Relaciones Exteriores italiano, Franco Frattini, anunció hoy que su gobierno dará a los rebeldes libios hasta 400 millones de euros (US$ 586,1 millones) en efectivo y ayuda de combustible respaldados por los activos libios congelados.

Esa promesa se conoció en la tercera reunión del llamado grupo de contacto de Libia, formado por Estados Unidos, Francia y Reino Unido y los aliados árabes Qatar, Kuwait y Jordania. Además, se está presionando a los insurgentes para que ofrezcan un plan detallado sobre cómo gobernarían el país si Gaddafi renunciara o fuera derrocado.

"La comunidad internacional está comenzando a hablar de lo que podría constituir el final del juego", dijo un destacado funcionario estadounidense a periodistas a bordo del avión de la secretaria de Estado Hillary Clinton, que aterrizó en Abu Dhabi anoche.

"Tenemos solo en Italia unos US$8 mil millones de activos financieros libios congelados, que no pertenecen al régimen sino al pueblo de Libia", dijo Frattini.