SEÑOR DIRECTOR:

El nombramiento del seremi del Medio Ambiente de la Región de Magallanes y Antártica chilena proveniente de una empresa ligada al desarrollo de hidrógeno verde, configura un duro golpe a la legitimidad de la autoridad ambiental, justo en medio del impulso a la industria del hidrógeno a gran escala en la región y en el país.

Esta imprudente decisión erosiona severamente la confianza de la ciudadanía en la institucionalidad, hipotecando el legítimo mandato de gestión y toma de decisiones, poniendo en jaque, además, garantías mínimas de imparcialidad. Se trata a todas luces de una decisión insostenible desde el punto de vista político y social.

El gobierno está a tiempo de enmendar este error, revocando el nombramiento. Se hace imperativo el cumplimiento de criterios mínimos de transparencia, integridad e idoneidad a la hora de nombrar autoridades y velar por sobre todo por salvaguardar a nuestras instituciones y la fe pública.

Diego Luna Quevedo