SEÑOR DIRECTOR:

En estos últimos meses hemos visto que municipios de todo Chile han estado involucrados en importantes escándalos de corrupción, los que no miran color político, región o antigüedad en el cargo. Sin embargo, esto no es nuevo, entre el 2009 y el 2023 el Consejo de Defensa del Estado se ha querellado contra 135 municipios (en Chile hay 345) y de esos 37 son contra alcaldes.

Hoy los antecedentes de corrupción municipal no pasan desapercibidos mediáticamente, y ello incidirá más que nunca en las primarias y elecciones municipales, principalmente porque los líderes comunales pasaron a ser figuras de conocimiento nacional, como cualquier diputado, senador o ministro.

Esta coyuntura abre espacio para el surgimiento liderazgos outsiders, que si logran posicionarse con propuestas de trabajo atingentes e historias atractivas tendrán una oportunidad de ganar. Así lo apoya la estadística: en las municipales del 2016 resultaron electos 56 candidatos independientes fuera de pacto, obteniendo en conjunto el 17% de la votación nacional, el 2021 casi se duplicó, fueron 105 con un 28% de los votos.

Las razones del por qué de este aumento saltan a la vista: la victoria de un independiente entrega al electorado mayor certeza de un trabajo bien hecho, probo y que permite “levantar el velo” para casos que hoy no se conocen. La razón es simple: como un profesional que llega a un buen puesto por mérito tendrá que validarse, demostrando con trabajo y cambios concretos en su municipio que fue la elección correcta.

Las candidaturas independientes jugarán un rol fundamental en las próximas elecciones y más aún, los alcaldes independientes serán clave en promover la transparencia en los próximos años.

Nicolás Pizarro Juliá

Subdirector Asuntos Públicos EK