Tras semanas en vilo oficialismo logra mantener la testera de la Cámara: Vlado Mirosevic se convierte en el nuevo presidente de la Corporación

Fue el bloque de gobierno el que logró, tras dos rondas de comicios, conseguir los votos necesarios para asumir la testera de la Corporación de la mano de Vlado Mirosevic, quien en una segunda vuelta, donde se pedía mayoría simple, logró 77 votos.


Se esperaba una tensa sesión y así fue. Hasta última hora se mantuvo la incertidumbre respecto a quién asumiría la presidencia de la Cámara de Diputados en reemplazo de Raúl Soto (PPD).

Los diálogos impulsados desde el oficialismo y la oposición para apoderarse de la testera, y que venían desde hace algunas semanas, duraron hasta último momento, pero finalmente tras un duro duelo fue el bloque de gobierno el que logró, tras dos rondas de comicios, conseguir los votos necesarios para asumir la testera de la Corporación de la mano de Vlado Mirosevic, quien en una segunda vuelta, donde se pedía mayoría simple, logró 77 votos contra 73 de Miguel Ángel Calisto (DC). Carlos Bianchi (ind) y Catalina Pérez (RD) lo secundarán en el cargo como primer y segundo vicepresidente, respectivamente, tras conseguir ambos 79 votos.

Un camino pedregoso

Lo ocurrido este lunes en la Cámara fue el punto cúlmine de varias semanas de negociaciones, diálogos y reproches. La incertidumbre respecto a que se pudiese incumplir el acuerdo de gobernabilidad firmado este año por el oficialismo, el PDG y la DC duró por varios días. Según ese pacto este año la presidencia de la corporación le correspondía a la militante PC, Karol Cariola, pero su nombre no generó consenso entre quienes lo suscribieron, por lo que poco a poco comenzó a crecer la incertidumbre respecto a si podría reunir los 78 votos necesarios para liderar la Corporación.

Pese a los diálogos que tenían constantemente las distintas colectividades, el pasado 2 de noviembre el Partido Comunista comunicó que decidió bajar a Cariola y renunciar “a nuestra legitima opción” de presidir la Cámara Baja. Una determinación que tensionó más aún el ambiente político por las recriminaciones entre los comunistas y la Democracia Cristiana, quienes habían dicho que no votarían por la diputada si es que la colectividad liderada por Guillermo Teillier no se desmarcaba de una querella presentada por sectores cercanos al PC en contra de Sergio Micco, exdirector del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).

Bajo ese escenario y a pocos días de la elección de la mesa, las negociaciones se intensificaron para buscar un nombre de reemplazo. Así fue como surgió el de Vlado Mirosevic. Sin embargo el hecho de que haya sido vocero de la campaña del Apruebo -al igual que Cariola- generaba resquemores en algunos sectores, como la DC.

En paralelo, en tanto, en la derecha buscaban fórmulas para hacerse con el poder de la Cámara Baja y entablaron una serie de conversaciones con algunos partidos de centro y centroizquierda. Es así como el jueves en la noche, en una reunión que contó con representantes de Chile Vamos, de Republicanos, del PDG y Miguel Ángel Calisto (DC) y Tomás Lagomarsino (PR) se avanzó en un preacuerdo para apoderarse de la Cámara, donde el nombre del diputado Víctor Pino (PDG), agarró fuerza para encabezar la Cámara. Finalmente fue el demócratacristiano Calisto quien fue la carta del sector por la presidencia.

En esos diálogos también hubo acercamientos con algunos parlamentarios “descolgados” del acuerdo de marzo del oficialismo, como Pamela Jiles, René Alinco y Carlos Bianchi.

Sin embargo, durante el fin de semana hubo un quiebre al interior de la bancada del PDG, ya que la mitad de sus integrantes estaba por seguir con este pacto con la derecha, mientras que la otra parte se inclinaba más por estar con el oficialismo y cumplir el acuerdo.

A esto se sumaban los mismos resquemores que había al interior de Chile Vamos respecto a pactar con estas tiendas, especialmente por una posible fuga de parlamentarios como también una eventual dispersión de votos de cara a las municipales.

¿De dónde salieron los votos para Vlado?

La votación por la presidencia de la Cámara dejó a dos bancadas divididas: el PDG y la DC.

En la tienda donde Franco Parisi es uno de sus pilares, dos diputados Karen Medina y Ruben Oyarzo apoyaron a Vlado, mientras que Víctor Pino, Yovana Ahumada y Roberto Arroyo lo hicieron por Calisto. En tanto, Gaspar Rivas no votó.

En la Democracia Cristiana ocurrió algo similar, ya que también sus integrantes se dividieron. Por el diputado liberal estuvieron Ricardo Cifuentes, Alberto Undurraga, Felipe Camaño y Héctor Barría. En cambio, por Calisto, militante DC, además de él mismo, lo respaldaron Joanna Pérez, Eric Aedo y Jorge Saffirio.

Jornada Tensa

Hasta última hora se mantuvieron las conversaciones y diálogos de pasillo por parte del oficialismo y la oposición para lograr conseguir los respaldos necesarios para encabezar la Cámara.

A las 12.00 la ministra Segpres, Ana Lya Uriarte se reunió con representantes de la DC y el PDG para poder lograr un acuerdo que permitiese mantener el acuerdo.

En la previa, el jefe de Bancada de la falange, Eric Aedo abogaba por un acuerdo “más amplio” y que considerase a la derecha, mientras algunos diputados del partido, como Miguel Ángel Calisto, transmitían que votarían por Víctor Pino (PDG), desconociendo el acuerdo de administración del oficialismo.

En tanto el renunciado presidente de la Cámara, Raúl Soto advertía que “no le hace bien a la institución que a pocas horas de la elección de la próxima mesa tengamos tanta incertidumbre”.

En tanto, Lagomarsino, quien había participado de las reuniones con la derecha, sostuvo durante la mañana del lunes que si bien Mirosevic “es un gran nombre”, él esperaba “ver a un oficialismo tomando conciencia de que tiene que construir mayorías. El gobierno tiene el 43% de la Cámara y el 33% del Senado y, por lo tanto, tiene que haber un ejercicio práctico, pragmático de construir mayorías”. Horas después de esta primera afirmación, Lagomarsino informó que decantaría su apoyo por Vlado.

Concluida la cita con Aedo, Uriarte declaró que “para nosotros la presencia de la DC institucionalmente, su bancada, en esta definición de la conducción de la Cámara de Diputados, es realmente muy importante”.

La jornada siguió. Y en la previa al inicio de sesión, la diputada Cariola emplazó a los firmantes del acuerdo a respetar la palabra empeñada. “Es una responsabilidad política de la democracia eliminar los vetos y el anticomunismo que se ha gestado a raíz de esta discusión. Es muy lamentable la situación que hemos tenido que enfrentar en relación a generar este tipo de situaciones, la Ley Maldita se eliminó hace muchos años por lo tanto el PC vamos a seguir luchando por nuestro derecho a estar en espacios de representación política”, indicó.

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