Warren Buffett pasó el año pasado construyendo una participación masiva en Apple e invirtiendo miles de millones en los mayores bancos de EEUU, pero el rally de este año no le ha interesado. El resultado ha sido una acumulación récord de efectivo en Berkshire Hathaway, hasta US$122.000 millones.

En el segundo trimestre la compañía vendió acciones por un valor de US$1.000 millones más de lo que compró, su mayor venta neta desde finales de 2017. Adicionalmente, Buffett ha frenando las recompras de las propias acciones de Berkshire.

La creciente cantidad de efectivo es un reflejo de la fortaleza de los negocios operativos que Buffett, que le permite a los inversionistas multimillonarios flexibilidad para moverse rápidamente cuando surgen grandes negocios. Pero él mismo ha reconocido que tener más de US$100.000 millones genera pocos beneficios y pesa sobre el crecimiento de la compañía.