Bret Easton Ellis, autor de American Psycho: “Creo que la sensibilidad con los millennials ha sido sobreexplotada”

Después de casi 10 años sin publicar, dos libros del escritor estadounidense llegan a nuestro país: su último trabajo llamado Blanco, una especie de autobiografía, y su clásico título llevado a la pantalla grande en 2000. Cuenta que volvió a encantarse con la escritura y que no pretende erigirse como la voz de su generación. Aclara que pese a todo lo que se le critica, no tiene mala opinión de los millenials. En exclusiva para Culto, una conversación imperdible con uno de los mejores autores de su tiempo.


Es el “niño terrible” de la literatura de los Estados Unidos, y llevaba casi una década sin publicar desde Suites imperiales (2010). Pero en 2019 Bret Easton Ellis (1964) sorprendió a sus seguidores. Resulta que publicó Blanco, un libro autobiográfico, donde amén de su particular prosa, cuenta su vida y aborda distintos puntos en los que se explaya con sus opiniones. Sobre las redes sociales, la sexualidad o la sociedad contemporánea.

“Me toma mucho tiempo escribir un libro –cuenta al teléfono en conversación con Culto–. Es muy extraño, ahora he publicado siete libros, quizá ocho, y eso es muy poco en una carrera de 35 años”.

Blanco llega en noviembre a nuestro país vía Literatura Random House, es por eso que decidimos contactarlo. Eso sí, puso exigencias. Había que llamarlo a su residencia en Los Ángeles, California, y hablaría solo de sus libros, no de las elecciones presidenciales que enfrentan a Joe Biden con Donald Trump. La política no está dentro de sus intereses.

Easton Ellis es uno de los mayores exponentes de la narrativa estadounidense dentro de la llamada Generación X, junto a David Foster Wallace o Chuck Palahniuk. Blanco se inscribe dentro de una carrera brillante, que le ha valido ser catalogado como el “nuevo Hemingway”. Tiene novelas imperdibles como Menos que zero (1985) o Las leyes de la atracción (1987), pero su boom se dio con American Psycho (1991), con su consiguiente adaptación al cine en el año 2000. Con esta última novela también hay novedades, pero por ahora, no nos adelantemos.

El origen de Blanco hay que encontrarlo en el canal de Podcast de Bret Easton Ellis. Fueron su agente literario, y un amigo suyo –Matthew Specktor, a quien dedicó el libro– los que le sugirieron la idea de hacer unos ensayos de no ficción. Entonces, el material que se encuentra en los podcasts quedaba perfecto para esta iniciativa. Specktor ayudó a Easton Ellis a reunir el material. Pero, inquieto como siempre, el autor de Los confidentes quería hacer algo más que una mera recopilación.

“Yo no quería hacer una colección de ensayos, yo quería hacer un único y gran ensayo –cuenta Easton Ellis–. Un solo libro, que estuviera dividido en partes y eso comenzó de alguna manera a convertirse en una memoria, ya que de lo que se trataba o, al menos como yo lo veía, era de delimitar la Generación X, o sea, empezar en un lugar y reencontrarse en otro. Y con este tema de los podcast me di cuenta que sí existía una narrativa y un tema unificante”.

En rigor, Blanco no es exactamente una autobiografía como las que se conocen tradicionalmente. No es simplemente un relato cronológico. “Si realmente quisiera haber hecho una memoria, habría sido mucho más detallista y más profundo con ciertos aspectos que están tratados en términos generles en Blanco. Por eso pienso que Blanco es un ensayo sobre la Generación X y no sobre mi, que en un punto lo es, pero no lo abordé así”.

Bret Easton Ellis cuenta que con el proceso de trabajo de Blanco de alguna forma se reencontró con el gusto de escribir un libro, más allá de los guiones televisivos y los monólogos que lee en su podcast. “Esto realmente me trajo de vuelta al goce de escribir. Fue una experiencia literaria de verdad, mucho más que escribir guiones para la pantalla. Disfruté de verdad en escribir en vez de ‘X sale de casa, Paul camina hacia la puerta. Golpea’ y ese tipo de cosas. Creo que de alguna manera es el sentimiento de escribir otra novela o una memoria serializada”.

Como buen oriundo de la Generación X, Easton Ellis ha manifestado en más de una ocasión su incomodidad con las redes sociales, cosa que por supuesto desarrolla en Blanco. Para él, el punto crítico es lo que se puede decir y lo que no en plataformas como Twitter o Facebook.

“El tema es la libertad de expresión, la libertad de palabra y de cómo las redes sociales no incentivan esa libertad de expresión y no es lo que quieren que hagas –dice el autor de Lunar park–. Ellos quieren que seas sumiso y que en silencio sigas un patrón, y eso es peligroso. Es peligroso en tanto una policía del lenguaje. Es peligroso, pero es algo que todavía no hemos experimentado en su totalidad aquí, en Estados Unidos, aunque algo comienza a aparecer, y esas son las cosas que te impulsan a escribir”.

-En Blanco señalas que no te agradan las redes sociales. ¿Fue esto un factor decisivo para escribir el libro?

-No. En realidad, el deseo de escribir el libro fue el entusiasmo de cierta gente que me rodea: me editor, mi agente, mis amigos que me incentivaron a hacer esto. La hebra narrativa comienza en algún momento en los sesentas, setentas y luego termina en algún lugar en otra época, en el verano de 2018. Qué le ocurrió a esa persona, a un miembro de esa generación durante esa cantidad de tiempo, ese es el tema.

-En este libro defiendes el humor ácido, y criticas al “nuevo puritanismo”. ¿Tienes como intención ser la voz de la gente que piensa como tú, o hablas solo a título personal?

-Solo hablo por mí mismo, no pretendo hablar por nadie más. O sea, cuando era muy joven y se creía que yo era la voz de mi generación y había un montón de voces que podían ser la voz de esa generación, la verdad es que no estoy interesado en ser la voz de una generación, sólo hablo por mí mismo y no estoy interesado en hablar por los demás. Por cierto, no trato de hacerlo de una manera fácil, mis contenidos no tienen que ver con lo mainstream.

Una de las cosas que Easton Ellis dice haber descubierto con el tiempo, es que “tienes que ser un poco odiado”. En el fondo, pagar el costo de ser auténtico. "Que no simplemente se comente tu libro como ‘sí me gustó’ y punto. He sido el escritor peor criticado de mi generación en los Estados Unidos, eso es simplemente un hecho. Por supuesto, a una parte de la gente realmente no le gusta lo que escribo, y eso está bien, uno no se puede preocupar de eso, uno tiene que escribir lo que quiere escribir.

Además, aclara que Blanco, pese a su contenido crítico, no es un libro político. “No me interesa la política, pero menciono la forma en que la gente reacciona hacia la política, escribo sobre mis amigos, no sobre la política, sobre mis amigos reaccionando a la política, y entonces comienzas a ser considerado como un conservador, un republicano, un adherente de Trump, cuando en realidad todo lo que uno estaba haciendo era hablar sobre los medios, sobre la amistad”.

“Talkin' 'bout my generation”

Otro punto que ha causado controversia a nivel mundial, es cuando Easton Ellis habla sobre la generación “millennial”. En el libro los llama “la generación gallina”, lo cual le ha valido una serie de críticas, aunque según él, ese es un punto que ha sido mal interpretado.

“Las cuatro o cinco páginas acerca de los millennials han sido sobreexplotadas y han sido leídas equivocadamente, porque al fin al de esa sección fraternizo con ellos. Muchos de mis amigos son millennials, y yo mismo vivo con un millennial. Tiene que ver con cómo yo experimento el tema, y escribo de eso con honestidad, y un montón de millennials me han dicho, estás en lo cierto, estás completamente en lo cierto y eso nos tocó”.

¿Es una defensa, entonces, de la Generación X? Easton Ellis lo desmiente. “Escribo muy, pero muy críticamente acerca de mi propia generación y los critico libro tras libro, especialmente en Amerycan Psycho en cuanto a su materialismo. Satirizo todo, la igualdad de oportunidades. Puedes ser viejo, puedes ser joven. Y por supuesto que me satirizo a mí mismo y a mis amigos. Creo que la sensibilidad con los millennials ha sido sobreexplotada”.

“No puedo leer la novela sin pensar en Christian Bale”

Junto con Blanco, y también vía Literatura Random House, a las estanterías nacionales llegará American Psycho, la tercera novela de su trayectoria. Original de 1991, tuvo una recordada versión cinematográfica dirigida por Mary Harron, con Christian Bale (Batman Inicia) en el rol principal. Además de un elenco que contó con nombres de la talla de Willem Dafoe, Jared Leto y Reese Witherspoon.

“No puedo creer que todavía sigamos hablando sobre este libro, es loco –dice cuando le mencionamos el tema–. Yo pensaba que era un libro que iban a leer unas cinco mil personas y nada más, no pensé que se iba a volver un libro tan popular”.

¿Cómo surgió la idea de escribir la historia de Patrick Bateman? El atormentado y sicópata ejecutivo asesino de Wall Street, quien aparentemente lo tiene todo, pero en rigor, se siente vacío. Ocurrió cuando el autor de Glamourama se mudó a Nueva York, hacia 1986, ahí se le ocurrió escribir un libro sobre Wall Street y que de alguna forma siguiera sus dos títulos anteriores (Menos que cero y Las leyes de la atracción). Luego, decidió que se trataría sobre un hombre joven en Wall Street.

“Hice una investigación, así algunos amigos míos me presentaron hermanos mayores y comencé a salir con ellos, a cenar, a clubes nocturnos, quería entender lo que hacían, cómo estos hombres tan jóvenes se volvían tan ricos, qué estaban haciendo. Ellos no querían hablar sobre eso. Les interesaba hablar sobre quién era la chica más bonita, los mejores restoranes, los mejores trajes, era una orgía increíble de estatus”, cuenta Easton Ellis.

“Luego de unas semanas, sentado junto a uno de ellos en un restorán, pensé que era un asesino en serie, y no sé por qué lo pensé, no sé por qué hice esa conexión, solo me pareció pertinente –añade Easton–. Y así fue como nació Patrick Bateman, de hecho, era un hombre joven muy promedio y el libro iba a ser una historia muy mainstream sobre un joven en Wall Street, con su novia, con algunos problemas”.

Para Bret, la novela se vio salpicada de un elemento que se movía fantasmalmente en esos años, entre bebidas Free y juegos Pac-man. “Yo creo que fue el surrealismo de los ochentas en Nueva York lo que comenzó a afectar el libro, además del surrealismo que invadía mi propia vida, me sentía como un jovencito famoso, una nueva celebridad, muy perdido en muchos sentidos, y creo que eso influyó en el libro, trataba de encontrarme a mí mismo, de encontrarle sentido a las cosas, y así fue como nació el libro”.

En total, le tomó tres años escribir American Psycho.

-¿Crees que Amerycan Psycho es tu mejor novela?

-Mmmm…. Bueno, para contribuir con la publicidad, digamos que sí, por supuesto…

-(Risas)

-Es decir, lo estoy diciendo porque lo estás publicando y quieres que la gente lo lea, supongo. Digamos que American Psycho es mi mejor novela. Yo soy muy crítico con mis propias novelas, escribí American Psycho hace mucho tiempo, a pesar de que aún es muy popular y sigue en imprenta por todos lados, además la película la ayudó mucho. No sé, no puedo releer mis novelas ahora, porque fueron escrita en períodos diferentes de mi vida, ahora soy una persona diferente, una mirada diferente.

Se toma una pausa, y sigue con la idea. “Sin duda, es mi libro más conocido y siempre será el libro más importante en mi obituario, así que sí, el libro fue una obra muy importante para mí en términos de encontrarme a mí mismo, entender cosas de la vida y convertirme en un adulto. En cierta forma, escribí el libro en un momento en que quería convertirme en un adulto, en un hombre, y la controversia en torno a la publicación en los Estados Unidos me hizo madurar también. Sin duda, es el libro por el que soy más conocido. Ahora, ¿Es mi libro preferido, mi mejor libro? No, no lo creo. Pero creo que es el favorito de muchos lectores, de seguro, no creo que ningún otro libro lo sea”.

Por supuesto, tuvo palabras para el filme. Para él, fue una sorpresa, porque dice que no escribe novelas para que se hagan largometrajes. “Nunca imaginé que alguien hubiera querido hacer una película sobre el libro, me parecía imposible, y aun así había gente interesada: Cronenberg, Oliver Stone, Brad Pitt, Leo Dicaprio. Era muy extraño que tanta gente quisiera hacer una película. Y finalmente fue Mary Harron la directora y encontró a este actor joven, Christian Bale. Cuando vi la película por primera vez pensé ‘bueno, no funciona realmente, pero es un buen intento’”.

Pero esa fue una opinión inicial, luego Easton Ellis la empezó a masticar de otra manera, y hubo un factor decisivo en ello. “Con el paso del tiempo comenzó a gustarme cada vez más, sobre todo Christian Bale, y ahora ya no puedo leer la novela sin pensar en Christian Bale, es increíble lo bien que encarnó a Patrick Bateman, de una forma tan inteligente. Bueno, hay tantas películas malas sobre libros, tantas películas malas, que debería sentirme agradecido por American Psycho, es una experiencia absolutamente distinta y creo que cualquiera que vea la película y lea el libro, va a entender de que existe una enorme diferencia entre los dos”.

-¿Qué piensas de que estos libros, American Psycho y Blanco, lleguen a Chile?

-Em…creo que debería yo preguntarte eso a ti. Es decir, no lo sé. ¿Qué quiere decir eso?...

-Me refiero a que cuando escribiste el libro, ¿Pensaste que gente de cualquier país o parte del mundo lo leería?...

-Nunca pensé eso. Siempre me sorprende que los libros se vendan, sobretodo en otros países, creo que unas de las cosas que hizo que American Psycho siga siendo tan popular es que hay algo universal en Patrick Bateman, finalmente me percato de esto: él está perdido, está perdido en la sociedad, no cree en la sociedad, es un paria. ¿A dónde podría ir? Hay que buscar la forma de adaptarse, pero eso, al mismo tiempo, te vuelve un poco loco. Creo que mucha gente se siente de esa forma, creo que American Psycho se volvió para algunas personas un reflejo de su propia alineación, de su propia condición de sentirse atrapados, de estar perdidos en un mundo con el que están en desacuerdo. No creo haber pensado en esto en el momento en que estaba escribiendo el libro, pero luego de casi 30 años en imprenta he llegado a darme cuenta de esto, de que esa es la razón de porqué a la gente le gustó el libro. Ya sea en Alemania, Francia, España, Chile, Filipinas, donde sea, creo que existe la sensación de la que estoy hablando. O puede que sea sencillamente el sexo y la violencia. No lo sé.

La conversación finaliza. Bret Easton Ellis se despide amablemente. “Muchas gracias y que tengas un muy buen día”. Así, quizás el mejor novelista de su generación continúa con su vida, los podcasts, y escuchar discos enteros, y no canciones sueltas, como ha dicho anteriormente.

La película American Psycho, está disponible en el streaming, en Amazon Prime.

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