La cadena ITV News reveló que mientras todo Londres estaba confinado producto de la pandemia, el staff de Downing Street estaba celebrando el cumpleaños sorpresa del primer ministro británico, Boris Johnson, el 19 de junio de 2020. Ahora Scotland Yard va a investigar “varios eventos” relacionados con una “potencial posible violación de las regulaciones por Covid-19″, complicando aún más la posición política del líder conservador.

Hasta el momento, la policía no había querido actuar dado que estaban esperando el resultado de la investigación interna que está llevando a cabo la alta funcionaria británica Sue Gray. Pero, sobre todo, el motivo para no hacerlo es el impacto político que podría causar en toda esta crisis.

La jefa de la policía, Cressida Dick, confirmó ante la asamblea municipal de Londres que su departamento investiga ya varias de las fiestas que tuvieron lugar en la sede de gobierno. “Puedo confirmar que la Policía Metropolitana investiga en estos momentos varios actos que ocurrieron en Downing Street en los últimos dos años, en relación con la posible violación de las reglas de distanciamiento social para combatir el Covid-19″.

Hay tres criterios que llevaron a Cressida Dick a investigar los sucesos. “Mis tres factores eran y son: había pruebas de que los implicados sabían o deberían haber sabido que lo que estaban haciendo era un delito; donde no investigar socavaría significativamente la legitimidad de la ley, y donde había poca ambigüedad en torno a la ausencia de cualquier defensa razonable”.

“Entonces, en esos casos, donde se cumplieron estos criterios, las pautas sugirieron que potencialmente deberíamos investigar más y terminar dando multas a las personas”, agregó.

“La mayoría de los ciudadanos ha actuado de manera responsable durante la pandemia; muchas, muchas personas, incluyendo muchos londinenses, y mis colegas en la policía, hemos realizado enormes sacrificios y muchos han sufrido pérdidas considerables durante la pandemia”, subrayó Cressida Dick.

La intervención de la policía trae consigo ciertos problemas para la investigación que lleva a cabo la alta funcionaria británica Sue Gray. Se suponía que para finales de esta semana se sabrían los resultados de las indagaciones a su cargo, pero la publicación se retrasará hasta que Scotland Yard haya concluido sus propias investigaciones.

“La investigación que lleva a cabo Sue Gray continuará. Hay un continuo contacto con la Policía Metropolitana”, aseguró la fuente oficial del gobierno.

Es muy grave. La investigación plantea la posibilidad de sanciones para Johnson y su personal si se descubre que se han infringido las normas sanitarias. Cressida Dick planteó la posibilidad de que se emitan sanciones fijas para algunos de los asistentes y dependerá de la conclusión que tenga la indagatoria.

Sin embargo, el inicio de una investigación penal y el retraso del informe de Gray le dan un cierto respiro a Johnson. Según la prensa británica, sería una forma de indulto para el premier, ya que el interés y la furia disminuirán cuando se publiquen los hallazgos.

Pero esto también podría alentar a los parlamentarios a enviar sus cartas al Comité 1922 para dar pie al mecanismo de censura y lograr que el premier dimita.

El alcalde de Londres, el laborista Sadiq Khan, elogió la decisión de abrir una investigación policial y dijo que el público “espera con razón que la policía respete la ley sin temor ni favoritismo, sin importar a quién involucre”.

“Nadie está por encima de la ley. No puede haber una regla para el gobierno y otra para los demás”, agregó Khan.