Cortinas

Las cortinas son el marco de una gran composición que es el living o el dormitorio. Dependiendo de si queremos dar un punto focal potente en los sofás, las cortinas pueden 'acompañar'. Por el contrario, si los sofás están pensados como bloques neutros de color, las cortinas nos dan libertades. Las telas que se recomiendan son algodones, linos y sedas. Las cortinas de la ilustración son de algodón 100% y pertenecen al catálogo de Christian Lacroix que tienen en Manor House, San Pascual 78.

Algodón

Es la base de un gran porcentaje de géneros utilizados en ropa de casa. Desde sábanas a cortinas. El algodón puede estar presente 100% en la composición de la tela y no por ello ser grueso, eso dependerá del hilado de este. Pero por lo general las telas 100% algodón tienen una larga duración y son resistentes, eso sí que en la medida en que se les añade poliéster aseguran mayor durabilidad y menos deformación.

Telas ideales para tapices en base de algodón son aquellas en que una trama de algodón es la base y sobre ella se urde con otro material, por ejemplo seda, chenille o felpa.

El algodón tiene una composición firme, pero sus fibras son finas, por lo que tiende también a ensuciarse más en comparación con otros textiles. En tapicería la vida de una tela de algodón puede ser de hasta 10 años.

En los cojines hay una combinación de ikat, también 100% algodón de Manor House, algodón listado de Siena (A. de Córdova 4048) y chenilles de Laura Ashley y Fabrics (Parque Arauco).

Terciopelo

Se trata de una tela gruesa de pelo denso. El terciopelo se teje y luego se cortan sus hilos, por lo mismo se logra su textura reconocible. Puede tejerse en seda, lino, mohair y fibras sintéticas, con un acabado más fino, brillante u opaco en cada caso. Ideal para tapices y cojines. En cortinajes su efecto resulta dramático y puede resultar excesivo en espacios pequeños. La felpa, por su  parte, es una tela que surgió para fabricar ropa, pero se adecuó a la tapicería; su base, a diferencia del terciopelo, es la lana.

Brocado

Originalmente tejido con seda, se llama así a las telas que tienen diseños y texturas en su superficie y un fondo mate. Los brocados o broccatos, se hacían con hilos de oro o plata. Hoy se encuentran en poliéster y hechos solo con algodón. 

Este sillón está tapizado con un algodón listado de Siena.

El sillón de la derecha, arriba de la silla,  está tapizado con un diseño clásico del catálogo que trae RS Maison de Missoni Home.

La silla tiene un terciopelo 100% algodón de  Le Cotonnier (A. de Córdova 3789)

En las imágenes hemos combinado en el sofá un terciopelo rojo de Le Cotonnier con un algodón rayado de Siena. En la banqueta, un algodón del catálogo de Missoni Home que tienen en RS Maison.

Sedas

Hay desde rústicas, ideales para tapices de sofás y sedas de hilados más finos, de un color, perfectas para detalles decorativos como cojines y cortinajes. Entre sus cuidados, el más importante es resguardarlas de la exposición directa al sol, porque se destiñen, jamás se deben lavar con agua porque se manchan, así es que debe hacerse siempre en seco.

En Manor House hay telas importadas de toda Europa. Una de las novedades es este lino intervenido que funciona a la perfección en cortinajes. La línea es inglesa, se llama Mulberry Home y es 100% lino bordado a máquina con aplicación de distintas telas.

Aqui vemos linos. En la banqueta uno de Le Cotonnier y en la silla, otro de Mei Line, importado desde Francia.

Cuando decida qué tela utilizar en sus cortinas, hay que considerar el uso de entretelas y forros. Esto dependiendo del efecto, ubicación y caída que se busquen. Cuando la opción es un look ligero y transparente, esta opción queda afuera. Si la idea es aislar climáticamente y que la tela potencie su efecto con un forro, considérelo.

Linos

Son telas fuertes, resistentes, tejidas a partir de la fibra de la planta del mismo nombre. Tiene una caída liviana y tiende a arrugarse.

No son recomendables para tapices porque no son muy resistentes, lo que no impide que uno se arriesgue. Una funda, por ejemplo, para un sofá, podría durar alrededor de tres años. Su limpieza siempre es en seco.

Pueden ser lisos, con hilados gruesos o muy finos, estampados o pintados a mano.

La lana, como la de este sillón que es de Le Cotonnier, es ideal para pequeñas superficies. También hechos con lana existen los tweed, utilizados en ropa, pero que de a poco han pasado a los muebles.

El algodón listado es una  alternativa de tapiz, simple y decorativo, además de resistente. Este es deSiena.

Uno de los estampados que marcan tendencia esta temporada es el ikat.Originalmente tejido, en sus versiones agiornadas está en algodones resistentes con estampados vivos, como este ejemplo del catálogo de Designers Guild, de Manor House. En cortinas y fundas quedan perfectos.

Aquí hay una propuesta que usa en el asiento, una seda rústica de Le Cotonnier y cojines de seda de Laura Ashley. Brocado de algodón  100% de Le Cotonnier. Esta tela se logra gracias a un sistema llamado 'mercerizado'; el algodón se trabaja y queda con más brillo.

Para tapizar un sofá de dos cuerpos, de un 1,80, se necesitan aproximadamente 17 m de tela, si es lisa. Si es estampada, alrededor de 18,5. Para un sofá de 2,20 se necesitan entre 19 y 20 m de tela, si esta es lisa; con calce hablamos de 21,5 m. Para la funda de un sofá de 1,80, se necesitan 12 m. Para una de tres cuerpos, aproximadamente 16 m. Todas estas medidas son referenciales.