Tras derrota del PSOE, Sánchez sorprende con adelanto de elecciones generales y el PP discute posibles pactos en España

El jefe del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, aparece después de emitir su voto en un colegio electoral durante los comicios regionales, en Madrid, el 28 de mayo de 2023. Foto: Reuters

El exvicepresidente Pablo Iglesias deslizó la posibilidad de que el jefe de gobierno pueda plantear un frente común a la izquierda alternativa, abanderada por la vicepresidenta Yolanda Díaz, en "buena parte" de las circunscripciones de cara a los comicios del 23 de julio.


Justo en momentos en que los partidos se encontraban digiriendo los resultados de las elecciones municipales y autonómicas del domingo -en los cuales el Partido Popular (PP) obtuvo buenos resultados y, al contrario, el Partido Socialista Obrero Español sufrió una dura derrota-, el presidente del gobierno y líder del PSOE, Pedro Sánchez, sorprendió con el anuncio de la disolución de las Cortes y un adelanto de las elecciones generales para el próximo domingo 23 de julio.

Antes de la debacle del domingo, Sánchez había insistido en que completaría su mandato de cuatro años con su socio de coalición, el izquierdista Unidas Podemos. Eso habría supuesto celebrar elecciones en diciembre. Sin embargo, el resultado en las elecciones locales y regionales cambió rápidamente el escenario político. “He tomado esta decisión a la vista de los resultados de las elecciones celebradas ayer”, dijo Sánchez desde el palacio presidencial de La Moncloa.

“Asumo en primera persona los resultados y creo necesario dar una respuesta y someter nuestro mandato democrático a la voluntad popular”, indicó.

Uno de los problemas que vaticinaban los expertos es que la fecha elegida para las elecciones anticipadas quedó programada en plena temporada de vacaciones de verano en España, cuando mucha gente probablemente estaría lejos de sus zonas de votación.

Los expertos han señalado que las elecciones municipales y autonómicas se habían planteado ya en la campaña como una suerte de primera vuelta y el PP incluso las planteó como un plebiscito contra Sánchez. Así, el PSOE redujo su poder territorial a la mínima expresión respecto a 2019, cuando tiñó el mapa de rojo con nueve gobiernos autonómicos y 15 capitales de provincia. En estas elecciones del 28 de mayo, los socialistas perdieron la Comunidad Valenciana, Extremadura, Aragón, La Rioja y Baleares y retuvieron la mayoría absoluta en Castilla-La Mancha y también podría mantener los gobiernos en Asturias, Navarra y Canarias, dependiendo de los pactos con otros partidos. Los socialistas también saldrán de la coalición de gobierno que ahora encabeza el PRC en Cantabria. A nivel municipal, el PSOE perdió Sevilla, que era su principal bastión, así como otras 14 capitales de provincia, entre ellas Valladolid, Castellón y Palma, y no logró su objetivo de ser fuerza mayoritaria en Barcelona.

En términos municipales, obtuvieron un 28,11% de los votos, esto es 1,2 puntos porcentuales y casi 400.000 votos menos de lo que lograron en 2019. Esto, sumado a la caída generalizada de Podemos y muchos partidos de izquierda.

La ministra de Educación y portavoz de los socialistas, Pilar Alegría, reconoció que el resultado fue “malo” para el partido y que no era “en absoluto” el que esperaban. También hizo una autocrítica y llamó a la “reflexión” para los próximos meses: “Debemos esforzarnos más para lograr esa confianza en las próximas elecciones”.

El PP liderado por Alberto Núñez Feijóo ganó en siete de las 12 comunidades autónomas en disputa y dominó varias regiones donde antes había ganado el PSOE, como Valencia, Aragón y La Rioja. Aún estaba por ver si el PP tendría que depender del grupo de ultraderecha Vox para formar gobiernos regionales.

Los populares, de la mano de Isabel Díaz Ayuso, obtuvieron la mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid, con 71 diputados; mientras que en el Ayuntamiento, José Luis Martínez Almeida hizo lo propio al obtener 29 de los 57 concejales que estaban en juego en estos comicios. Además, los de Feijóo obtuvieron la mayoría de escaños en La Rioja y en la ciudad autónoma de Melilla.

Feijóo dijo el lunes en conferencia de prensa que los resultados “son la expresión más patente de deseo de cambio” en la sociedad. En un encuentro con la Junta Directiva Nacional, el líder del partido movilizará a la colectividad este martes para ampliar en las generales el resultado del 28-M y culminar lo que denominó como la “derogación del sanchismo”.

Fuentes del PP dijeron a la agencia Europa Press que con el adelanto de las elecciones lo que Sánchez buscaba era que no “le devoren a sus barones” territoriales tras los malos resultados y que “no se hable de paliza” de los populares a los socialistas. Se espera que también se pronuncien sobre un posible pacto con Vox.

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, interviene durante un acto de cierre de campaña electoral del PP, en el Casino Primitivo, el 26 de mayo de 2023, en Albacete, Castilla-La Mancha. Foto: Europa Press

Vox, encabezado por Santiago Abascal, triplicó su número de concejales municipales respecto a los últimos comicios de 2019, luego de obtener el 7% de los votos del domingo. El apoyo del partido será clave si el PP quiere formar gobiernos en seis de las regiones que ganó. Abascal pidió a Feijóo unir fuerzas para derrotar a Sánchez en julio.

El PP, indicó el portal de RTVE, “no quiere hablar de pactos con Vox”. Feijóo estaba incluso dispuesto a “sacrificar” la formación de gobiernos encabezados por el PP a cambio de que triunfe un acuerdo que defiende desde hace años y que incluyó en su plan de regeneración democrática. La colectividad ha gobernado en lugares donde no fue la lista más votada en las pasadas elecciones municipales y autonómicas de 2019, como la Comunidad de Madrid, la Región de Murcia o Castilla y León.

El mal resultado de los socialistas y de Unidas Podemos fue interpretado de inmediato como una crítica de la opinión pública a la coalición de izquierda. El nuevo grupo de izquierda, Sumar, que lidera la segunda viceministra del gobierno, Yolanda Díaz, tampoco logró cumplir sus expectativas.

“Sánchez reacciona ante un shock con otro shock”, indicó a la agencia The Associated Press la analista política española Sandra León. “Evita deterioro del partido en dos sentidos: los costos de división interna en el gobierno hasta diciembre y la tensión con (líderes socialistas) territoriales”.

El exvicepresidente Pablo Iglesias deslizó el lunes la posibilidad de que Sánchez pueda plantear un frente común a la izquierda alternativa, abanderada por la vicepresidenta Yolanda Díaz, en “buena parte” de las circunscripciones. Así lo planteó en su intervención en Canal Red, la televisión que dirige, y señaló que el movimiento de Sánchez es “audaz, en el sentido de inesperado”, dado que seguramente el PP “no ha calculado” que los comicios generales llegarían tan pronto.

De cara a las generales

En un análisis realizado por el diario El País de cara a las generales de julio, se indicó que si los datos de los comicios del domingo se reprodujeran en unas generales, el resultado sería una victoria clara del PP en número de diputados en el Congreso, pero a costa sobre todo de Vox y de Ciudadanos. Feijóo se quedaría lejos de la mayoría absoluta aun sumando los diputados de la extrema derecha. Es decir, una votación daría un vuelco al Congreso, pero no produciría mayorías claras.

Las carpetas del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y del Partido Popular (PP) se ven en una mesa en un colegio electoral durante los comicios locales, en Ronda, sur de España, el 28 de mayo de 2023. Foto: Reuters

Con los resultados de las municipales, el PP pasaría a ser el partido con más escaños, con 143 diputados, 54 más que hasta ahora. Pero ganaría casi todos esos diputados a costa de Vox, que perdería 37, y de Ciudadanos, que desaparecería del Congreso perdiendo sus 10 escaños. El País dice que el desplome de Vox -pasaría de 52 a 15 escaños- “puede parecer contraintuitivo”, porque sus resultados territoriales han mejorado mucho con respecto a las municipales de mayo de 2019. Sin embargo, en las generales del 10 de noviembre de 2019 tuvo un 15% de votos, y el domingo, solo un 7%, lo que, aplicando la aritmética electoral, castigaría su representación duramente.

La suma de PP y Vox, por tanto, se quedaría en 158 escaños, lejos de los 176 que dan la mayoría absoluta y solo siete más de los que tienen ahora PP+Vox+Ciudadanos, indicó el periódico. “El riesgo de un Congreso ingobernable, dada la fragmentación y la polarización de la política española, vuelve a estar sobre la mesa”, indicó.

Aunque el PSOE perdió mucho poder territorial, si se usan los mismos resultados de las municipales permitiría al partido de Sánchez mantener o incluso aumentar su representación. De hecho, en porcentaje, el resultado de los socialistas es muy similar al de las elecciones generales de noviembre de 2019. Según los cálculos, los resultados de las municipales del 28-M darían al PSOE 122 escaños, dos más de los que tiene. Con las cifras de las autonómicas, se quedaría igual que ahora.

El análisis realizado por El País indicó que “las candidaturas de izquierda se han convertido en una sopa de letras que compiten entre sí y ni siquiera es sencillo al hacer la simulación asignar escaños a un partido u otro, pues se entremezclan dependiendo de municipios y provincias. Lo que sí muestra el ejercicio matemático es que la división del voto de los partidos a la izquierda del PSOE reduciría su representación conjunta y facilitaría una mayoría de derecha”.

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Pedro Sánchez, el presidente del gobierno español y líder del PSOE.

El voto de las municipales suele ser un buen termómetro sobre las preferencias electorales del país y, aunque no siempre supone un giro en la tendencia, casi siempre coincide, indicó el portal de RTVE. Desde el año 1995 quien gana los comicios locales consiguió el triunfo en las generales, con excepción de 2007, cuando el PP superó en número de votos al PSOE (pero no de concejales) y posteriormente, en las generales de 2008, el PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero obtuvo el triunfo. En las últimas elecciones de 2011, 2015 y 2019 sí se ha cumplido el patrón y quien ha ganado los comicios municipales ha llegado a la victoria en las posteriores generales.

Campaña por elecciones europeas

Por otro lado, el adelanto electoral coincidirá con el arranque de la Presidencia de turno del Consejo de la UE, que España asumirá el próximo 1 de julio, lo que dejará al líder del PSOE con menos tiempo para hacer campaña. La primera cita obligatoria en la agenda del semestre español al frente de la UE será la comparecencia de Sánchez ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo. A priori, su intervención ante el Pleno para exponer las prioridades del gobierno debería producirse el 13 de julio, después de participar en la cumbre de la OTAN prevista el 11 y 12 de julio en Vilna.

Asimismo, en los primeros días de julio el colegio de comisarios, con su presidenta, Ursula Von der Leyen, a la cabeza, tiene previsto desplazarse a Madrid, como es habitual cada vez que hay un relevo al frente del Consejo de la UE.

Por otra parte, Sánchez aún tendrá tiempo antes de las generales de participar en una de las citas estrella del semestre: la cumbre entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la primera desde 2015.

Tanto Sánchez como el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, han venido expresando la importancia de la cumbre y la voluntad de España de que permita estrechar las relaciones entre ambos bloques, iniciando una nueva etapa.

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