Ni “medio guiño”: en medio de controversia por ProCultura, la Fiscalía fue “la gran ausente” en discurso por Seguridad
Pese a que el Presidente partió su última Cuenta Pública hablando del tema de "seguridad ciudadana", dándole especial énfasis a la persecución del crimen organizado, no hubo palabras para el plan de fortalecimiento del Ministerio Público. Todo esto en medio de abiertas polémicas de casos que hoy salpican a La Moneda.

“El crimen y la inseguridad, son la principal preocupación de los chilenos. Es un fenómeno mundial del que nuestro país no ha estado exento”.
Así, el Presidente Gabriel Boric partió abordando uno de los principales ejes de su discurso: “la seguridad ciudadana”.
En dos horas y 31 minutos, tuvo gestos para ambas policías, Carabineros y la PDI, y destacó el “aumento significativo de los recursos a las policías que les ha permitido renovar su equipamiento y contar con mejores herramientas para enfrentar la delincuencia”.
Junto con esto, destacó que “estas instituciones además tendrán aumentos progresivos en su dotación para dar seguridad y respuesta oportuna a nuestra gente”.
Más adelante en su alocución al país, el Mandatario volvió a realizar guiños al trabajo policial, ante la presencia en el Salón Pleno del Congreso de los directores de la PDI, Eduardo Cerna y Carabineros, el general Marcelo Araya e -incluso- para las Fuerzas Armadas, que en medio de estado de excepción constitucional decretados en el país han debido enfrentar labores de seguridad pública.
“En este camino, Carabineros de Chile, la PDI y las Fuerzas Armadas han sido piezas fundamentales. Les rindo homenaje, por su compromiso cotidiano, muchas veces silencioso y siempre arriesgado, por protegernos”, sostuvo.
En el marco de todo esto hubo un gran ausente: el Ministerio Público. En todo su discurso, Boric no tuvo ni “medio guiño” al plan de fortalecimiento de esa institución que se tramita actualmente en el parlamento y que busca -justamente-, mayor dotación para el organismo para su rol de desbaratar y perseguir delitos en Chile.
Sólo una vez mencionó a la “Fiscalía”, pero como un actor más dentro de los que funcionan y que han incidido, según el Presidente, en que su Gobierno haya “quebrado” la tendencia al alza de homicidios en Chile. Pero nada más.
Y, no pocos sostienen al interior del organismo autónomo, esto se podría explicar por las recientes controversias que han enfrentado al oficialismo y fiscales por casos como el de ProCultura que ha golpeado duramente a La Moneda y por las filtraciones de antecedentes.
Tanto así, que se conoció -a propósito de esta investigación-, de los intentos del fiscal regional Patricio Cooper por intervenir el teléfono del propio Presidente Boric.
Al respecto, Valencia sostuvo que “confío en que la omisión por parte del Presidente de la República a priorizar la pronta aprobación por parte del Congreso y de la Fiscalía Supraterritorial, así como del proyecto de ley que fortalece al Ministerio Público, obedezca básicamente a razones de tiempo y no a que se le considere un asunto menor. Tengo confianza en que esos proyectos se van a aprobar este año porque son claves para poder asegurar compartir la impunidad en Chile”.
Presiones políticas
A la salida de la cuenta pública, el fiscal nacional Ángel Valencia, quien también estuvo presente en el último balance de la administración Boric, fue abordado y se le consultó si le ha sido difícil trabajar en medio de “tantas presiones políticas”.
Al respecto, la autoridad sostuvo que “mire, es nuestro empedrado, es habitual, es un fenómeno global, el de la politización de la justicia, pero esa es parte del trabajo que enfrentamos, y esa es la razón por la cual el Ministerio Público debe ser constitucionalmente autónomo, y por el cual hay que cuidar y proteger esa autonomía”.
Junto con esto, Valencia dijo que “hemos sostenido que para evitar la judicialización de la política o la politización de la justicia sería conveniente que en las causas, particularmente de corrupción, que nuestra ley permite que cualquier persona se pueda querellar, esa norma se modifique y no cualquier persona puede querellarse en esos asuntos porque les da acceso, por mandato legal, a un conjunto de antecedentes que están en las investigaciones que pueden ser mal empleados”.
Finalmente se le consultó si “en la decisión de sacar al fiscal Cooper de la investigación, ¿tuvo alguna influencia el peso de las presiones políticas?“, ante lo cual respondió que ”no, ninguna. Mire, los fiscales están acostumbrados a recibir presiones a naturaleza normalmente a través de los medios, pero no tienen ninguna relevancia. Aquí lo importante es que las causas avancen, que se esclarezca qué es lo que realmente ha ocurrido desde el punto de vista penal, y que persigamos con la mayor".
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