El resultado ya era claro. Con la televisión encendida, que mostraba el triunfo de Jeannette Jara (Partido Comunista) en la primaria oficialista de este domingo, a Carolina Tohá, la candidata del Socialismo Democrático, no le quedó otra que aceptar la decisión del electorado.

Lo hizo cuando subió al segundo piso de su comando, en calle Londres 76, Santiago, acompañada de su pareja, el ministro Mario Marcel. Ahí estaban varios de sus adherentes y su círculo más íntimo. Entre ellos, su mamá, Moy de Tohá; su hermano, José Tohá; sus hijos Matilde y Emilio Salinas, y su prima María Tohá.

La hoy excandidata llegó a su comando alrededor de las 19:00 de este domingo, cuando la tendencia ya era clara. Quiso hacerlo así. Por lo mismo, los primeros minutos del conteo de votos los vivió en su departamento, en calle Merced, Santiago.

La ventaja que Jara sacó -con un 60% de los votos a su favor- era algo que ni ella ni su equipo veían venir. De hecho, cuando recién partió el conteo de votos -con los primeros resultados en Magallanes-, desde su equipo aseguraban estar confiados en que se podía dar vuelta. Sin embargo, eso no ocurrió, por lo que rápidamente surgieron las recriminaciones internas y se desató la debacle en las filas del Socialismo Democrático.

Cuando llegó al segundo piso de su comando, Tohá, junto a la cabezas de su equipo -Pía Mundaca, el alcalde Claudio Castro, la exministra Ana Lya Uriarte (PS) y el senador Ricardo Lagos Weber (PPD)- entró a una sala de reuniones en que estaban los presidentes y secretarios generales -a excepción de Camilo Escalona- del Socialismo Democrático. La tensión era evidente.

Fue en ese espacio, mientras todos la escuchaban, que la otrora ministra del Interior llamó a Jara -con una voz débil, producto de un resfriado- para reconocer su triunfo, felicitarla y comprometerse a apoyarla.

Cuando colgó el teléfono, la exjefa de gabinete reiteró frente a los timoneles que el camino a seguir era ir hasta el comando de la militante comunista, en Avenida Ricardo Cumming, para aceptar el fracaso. Así lo acordaron durante la semana los secretarios generales de la alianza de gobierno. A su salida, dijo: “Para nosotros son unos resultados tristes, decepcionantes, no es lo que esperábamos”.

El resultado golpeó fuerte al Socialismo Democrático. Desde hace semanas, en línea con los que mostraban distintos sondeos de opinión, en la coalición reconocían que Jara llevaba la delantera y eso les preocupaba. Lo que mostraban las encuestas detonó una profunda crítica a la estrategia de campaña que desarrolló el equipo de campaña de la candidata, encabezado por Mundaca.

El cuestionamiento más extendido es que Tohá tardó mucho en tener un tono duro con sus contendores y eso dificultó que pudiera diferenciarse de ellos. Recién lo hizo cuando el Frente Amplio (FA), en su franja, hizo referencias a la Concertación y ella se vio obligada a defender los gobiernos de los que fue parte.

Sin embargo, en vista de los resultados, hoy en el Socialismo Democratico también diagnostican que destinaron demasiado tiempo en responder al abanderado del FA, Gonzalo Winter, mientras Jara avanzaba en la carrera presidencial sin contrapesos.

La favorita a la baja

En el Socialismo Democrático reconocen que se confiaron demasiado en la competitividad de Tohá. Y es que cuando la militante del PPD salió del gobierno el 4 de marzo, con el Ministerio de Seguridad recién aprobado, en su partido planteaban que la elección primaria era una suerte de trámite, necesario para fortalecer al sector antes de la primera vuelta, pero que ganaba de seguro, sin importar quiénes fueran los demás candidatos.

Y es que, por esas fechas, las encuestas mostraban a la jefa de gabinete como la favorita en los distintos sondeos de opinión.

Una primaria competitiva, en todo caso, era algo que Tohá anhelaba. Por lo mismo, cuando dejó el ministerio, se contactó con el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic (Frente Amplio), para instarlo a participar. Algo que no logró concretar.

Una de las prioridades de la exministra, además de ganar los comicios, era lograr una alta participación ciudadana. Su meta era superar la base de 1,75 millones de la primaria de Apruebo Dignidad de 2021, en que se enfrentaron Daniel Jadue y Gabriel Boric. Ese deseo, sin embargo. tampoco se le cumplió: 1,4 millones de ciudadanos votaron este domingo.

La idea instalada en el PPD de que Tohá tenía la primaria ganada por su trayectoria y alto conocimiento público fue reforzada por el trato que le dio Presidente Gabriel Boric cuando salió del gobierno. Fue una ceremonia emotiva, que la tuvo a ella como protagonista indiscutida: abandonó el gabinete sola, sin que nadie le quitara atención. Tanto así, que en la alianza de gobierno asumieron que ella era la candidata del Mandatario.

Se trató de un privilegio que Jara no tuvo. Ella dejó su cargo en el Ministerio del Trabajo con menos ruido, más de un mes después que Tohá. Eso sí, tras la aprobación de la reforma de pensiones.

En paralelo al problema de estrategia, el PS, el último partido del Socialismo Democratico en proclamar a Tohá como candidata, nunca se entusiasmó del todo con la postulación de la exministra.

La relación entre esta colectividad y la exalcaldesa fue incómoda desde un comienzo, en consideración de que los socialistas empujaron la candidatura presidencial de Paulina Vodanovic, la presidenta del PS para competir contra ella. Su carrera por La Moneda, en todo caso, duró dos semanas, hasta que la propia timonel socialista -en medio de presiones internas- declinó el 28 de abril, para proclamar a Tohá al día siguiente y privilegiar la unidad del Socialismo Democrático.

Sin embargo, varios militantes se resistieron hasta el final a hacer una campaña activa por Tohá. Eran de la idea de que se debía llevar una candidatura propia a la primaria. Algo que el PS no hace desde 2013, de la mano de Michelle Bachelet. Por lo mismo, quedaron decepcionados con la baja de Vodanovic.

Sumado a ese factor, en el PS hubo malestar por el discurso que adoptó Tohá en la recta final de su campaña. Su intervención más cuestionada al interior de la colectividad fue cuando, en Mega, sinceró que ella no es partidaria de que gobierne el PC. Los socialistas tienen una relación cercana a los comunistas, que se afianzó en el gobierno de Salvador Allende.

Tanto en PS como en el PPD, hubo críticas al estilo de Tohá, a quien acusaron de ser fría, poco carismática y mala en campaña. Todo lo opuesto, dicen las mismas fuentes, a Jara.

En medio de la debacle en el Socialismo Democrático, la exministra del Interior -tal como lo comprometió- llegó al comando de Jara, a las 20:30 del domingo, e hizo explícito el apoyo.

Recriminaciones a la mesa de Quintana

Pese al gesto de unidad, en esa coalición están inquietos. La derrota es más dura de lo que esperaban. Lo es particularmente para el PPD, el partido en que Tohá milita y que incluso presidió. Tanto así, que en la colectividad surgieron voces que comenzaron a exigir cambios en la directiva que encabeza el senador Jaime Quintana.

Uno de ellos fue el senador Pedro Araya (PPD), quien, antes de conocer el resultado, dijo a este medio que “es muy esperable que se realice un cambio de directiva” en el escenario de un fracaso. Hasta el cierre de esta edición, estaba citada una reunión de mesa para la tarde de este lunes. Aún no es claro si también se convocará a comisión política, aunque hay militantes que exigen que sesione.

En el Socialismo Democrático están devastados. Aunque institucionalmente estarán con Jara, en las directivas son conscientes de que para la militancia será complejo respaldar a una comunista en la presidencial. Al mismo tiempo, generó un dolor profundo percibir que perdieron completamente la hegemonía de la izquierda, ahora en manos del PC. Ya era algo que resentían desde el triunfo de Boric en 2021.

En los partidos de la coalición hay preocupación por lo que pueda pasar con la negociación parlamentaria ahora que la abanderada comunista triunfó y será la candidata del sector en la presidencial.

Y es que no solo saben que quedaron en una posición compleja para sentarse en la mesa con el PC, sino que asumen que hoy es más difícil competir en dos listas parlamentarias, con ellos en una nómina separados de los comunistas. Una fórmula que varios en la coalición empujan.

En el sector también se abrieron otro tipo de recriminaciones. En el PPD apuntan a que el PS nunca se comprometió realmente con la campaña de Tohá y además acusan al Frente Amplio por lo que, a su juicio, fue un soterrado diseño para perjudicar a la otrora ministra del interior. Así, acusan que en ese partido se volcaron para votar en favor de Jara.