El gobierno de Francia aumentará su influencia en la automotriz Renault después de que los accionistas no lograran bloquear un cambio en los derechos de votación que la compañía, lo que podría dañar su alianza con la japonesa Nissan.

En una reunión de inversores, un 60,5% de los accionistas con derecho a voto en Renault respaldaron una moción que habría impedido que el gobierno francés eleve su influencia en la firma.

Sin embargo, ese porcentaje fue más bajo que la mayoría de dos tercios necesaria para impedir que el ejecutivo galo aprovechara una nueva ley que dobla los derechos de votación para inversores a largo plazo.

Previa a la votación, el gobierno francés aumentó su participación en Renault hasta casi un 20%.

La administración ha dicho que quiere salvaguardar los intereses de Francia en Renault, que está ahondando sus vínculos con Nissan. Sin embargo, el fabricante francés ha advertido que la medida del gobierno podría dañar a esa alianza.

Renault es propietario de un 43,4% de Nissan. A su vez, la japonesa tiene un 15% de la francesa, pero no tiene derecho a voto asociado con su participación debido a que se considera que está bajo el control de su socio de alianza, algo que no agrada en Tokio.

Desde que Renault rescató a Nissan de la bancarrota en 1999, la automotriz japonesa ha superado a su matriz y responde por dos tercios de sus ventas combinadas de 8 millones de vehículos y una mayor participación en la ganancia.