Una economía que resolvió sus desbalances y una inflación que está convergiendo hacia el rango meta es el escenario que describió la presidenta del Banco Central, Rosanna Costa, en su presentación del Ipom ante la Comisión de Hacienda del Senado.

En su exposición, Costa sostuvo que “transcurrida casi la totalidad del primer semestre del año, podemos observar que el panorama inflacionario se ha comportado acorde con lo previsto. La inflación se acercó a 5% en marzo, pero ha ido descendiendo hasta 4,4% anual, sin que se observaran efectos de segunda vuelta por sobre lo histórico”.

“Más importante, se han ido consolidando sus perspectivas de convergencia a 3% durante la primera parte de 2026″, subrayó.

En esa línea, la presidenta del instituto emisor indicó que, “de este modo, las expectativas de inflación han vuelto a alinearse con la meta”.

También ayuda el tipo de cambio, dio a entender, el que “aunque con vaivenes importantes, se ubica en niveles similares a los del último IPoM, que, a la vez, son inferiores a los de fines de 2024″. Lo que sí alertó por los costos laborales, los que “siguen aumentado a tasas elevadas, lo que puede alimentar una inercia algo por sobre lo esperado”, señaló.

Con este telón de fondo, planteó que el proceso de control de la inflación “presenta algunas singularidades. No vemos una fuerza endógena que alimente presiones inflacionarias y que requiera ser neutralizada. Vemos una economía que crece, algo sobre lo esperado, pero principalmente por razones puntuales, y una inflación que converge a la meta”.

“Por esto, con un escenario similar al anterior, el cambio que planteamos para la política monetaria es más bien un ajuste de la oportunidad en que se van realizando los movimientos”, comentó.

Crecimiento

Junto con subrayar la convergencia de la inflación, Costa volvió a llamar la atención sobre “la necesidad de evaluar e implementar los cambios que nos permitan mejorar nuestro crecimiento de mediano plazo”.

“Este se ha reducido a lo largo de la última década y retomar una senda de mayor crecimiento de tendencia tiene una prioridad elevada, pues es el camino para mejorar las condiciones de vida de nuestros ciudadanos, al contribuir a cumplir con sus expectativas y satisfacer sus necesidades”, añadió.

En la ronda de preguntas de los parlamentarios, Costa fue consultada respecto de por qué, a pesar del alza de la inversión y las mejores cifras de crecimiento del primer trimestre, no ha mejorado el PIB tendencial.

Al respecto, respondió que en el primer trimestre la expansión de la economía se debió a factores estacionales “ligados a la producción de la biomasa pesquera y al sector agrícola, la guinda en particular, que tuvieron un peak muy significativo. Tuvimos además en el mismo periodo, por el lado del turismo receptivo, un flujo muy significativo porque se dieron condiciones particulares en que nuestros vecinos vinieron a hace compras a nuestro país, que están llevando a que la economía esté creciendo sobre su tendencia, pero hacia adelante estos factores tienden a diluirse”.

Además, explicó que las tasas de inversión y consumo que “estamos proyectando son consistentes con ese crecimiento de tendencia. ¿Por qué no se mueve? Porque es el crecimiento de largo plazo", dijo.

No obstante, manifestó que “en la medida que se van dando reformas estructurales que van mejorando la productividad; en la medida que veamos mejoras en fuentes, por ejemplo, de eficiencia en el uso de los recursos; en la medida que tengamos una evolución de la población que permita ir fortaleciendo el crecimiento, por ejemplo inmigración; son factores que irán revisando el crecimiento tendencial a largo plazo”.

“Será interesante en ese sentido tener antecedentes del Censo, y tener proyecciones de la capacidad o evolución de nuestra fuerza de trabajo hacia adelante”, apuntó.

Por otra parte, Costa sostuvo que la inversión, luego de “un periodo muy largo con tasas de decrecimiento, y a pesar de que en el primer trimestre el crecimiento fue nulo, vemos un surgimiento de grandes proyectos que es bastante significativo, principalmente en el sector energético en distribución y almacenamiento, y empiezan a aparecer en el SEIA grandes proyectos que tienen que ver con hidrógeno verde”.

“Todo estos son proyectos grandes que de alguna manera se piensan para periodos más largos, y por tanto son inelásticos a esta incertidumbre externa que estamos viendo”, destacó.

Junto con eso, Costa dijo que “veo un creciente interés por avanzar en todas las iniciativas que puedan alimentar incrementos en la productividad y aumento del producto tendencial, pero eso tiene que materializarse, y por ahora el crecimiento tendencial de nuestra economía está en torno al 2%”.

En tanto, consultada en la conferencia de prensa respecto de los niveles de desempleo, Costa comentó que “vemos que el empleo en lo más reciente ha perdido dinamismo, pero la composición está traspasándose del empleo informal al formal. Junto con ello, estamos observado una tasa de desempleo que está relativamente dentro del rango de empleo de referencia, por la parte superior; con tasas de crecimiento de los salarios por arriba de los crecimientos históricos. Desde la perspectiva de çómo apoya o no el crecimiento del consumo, vemos un mercado laboral ajustándose con mayor rezago, primero a la evolución de la economía, segundo, tiene algunos elementos estructurales que debe ir ajustando, y está ajustando en el tiempo algunos elementos de costos“.

Incertidumbre global

En línea con lo planteado en el Ipom, Costa explicó que a nivel global se mantiene la incertidumbre, donde “la guerra de Medio Oriente es un nuevo foco de atención importante. Es un conflicto bélico significativo en una zona compleja (...) Por ahora desconocemos su alcance, desarrollo y eventuales impactos sobre la economía mundial y local”.

“Este panorama de tensiones geopolíticas se enmarca en un contexto de alto endeudamiento público a nivel global y crecientes demandas para financiar gastos en defensa y otras áreas”, agregó la presidenta del Banco Central.