Arqueólogos extraen una pieza de la ancestral Ciudad Blanca en Honduras

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EFE.

Se cree que en aquella zona, Kaha Kamasa, existieron al menos tres asentamientos humanos de una civilización aún desconocida, que podrían ser antecesores de los indígenas Pech.


Un grupo de arqueólogos extrajo hoy con fines científicos una pieza de la Ciudad Blanca, en la Mosquitia hondureña, que guarda restos de una antigua y desconocida civilización, informó una fuente oficial.

Se trata de una pieza que pesa entre 272 a 318 kilos y este jueves fue presentada por el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, en el sector de El Aguacate, donde opera un aeródromo, en el departamento de Olancho.

El gobernante acompañó a un equipo de arqueólogos que extrajo la pieza de más de un metro de largo y medio de ancho hallada en Kaha Kamasa, Ciudad Blanca en dialecto misquito, de la que se viene hablando en Honduras desde hace varias décadas, pero poco se había informado a fondo.

Dijo que ha sido "una extraordinaria experiencia" haber participado en la extracción y traslado de la enorme pieza de arqueología.

Hernández destacó la importancia de promover este tipo de hallazgos, para que sean visitados, "no sólo por el tema académico, sino también por los turistas" locales y extranjeros.

"Miremos esto como una oportunidad de promoción y de turismo", subrayó el gobernante hondureño.

La pieza, de tres patas, fue trasladada al centro de investigación Ciudad Blanca, donde se analizará de que se trata y utilidad tenía, según las autoridades.

"Es importante que se reconozca la riqueza de esta zona; no sólo se trata del bosque, sino de toda la biodiversidad, tenemos una riqueza cultural enorme, así como arqueológica y antropológica", dijo el director del Instituto Hondureño de Ciencia, Tecnología y la Innovación, Ramón Espinoza.

Señaló que se cree que en Kaha Kamasa existieron al menos tres asentamientos humanos de una civilización aún desconocida, que podrían ser antecesores de los indígenas Pech, y en la misma existía una especie de taller o centro de producción de todos los artefactos ceremoniales hallados hasta el momento.

El sitio arqueológico abarca regiones de los departamentos de Gracias a Dios y Olancho, limítrofes con Nicaragua.

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