Kim Ki-duk: tres películas del cineasta surcoreano que puedes ver gratis

El fallecido director asiático destacó por sus propuestas experimentales, enfocadas en el contraste entre belleza y brutalidad. Según The Guardian, “sus escenas atraen a la gente con hermosos paisajes lacustres, solo para enviarlos a vomitar”, en alusión a uno de los filmes que podrás encontrar en este artículo.


Durante la madrugada de este viernes, la traductora Daria Krutova confirmó que el cineasta surcoreano Kim Ki-duk murió a causa de coronavirus en un hospital de Letonia. El director, quien tenía 59 años y publicó su última película, titulada Dissolve en 2019, destacó por su brutalidad tanto dentro como fuera de los sets de grabación.

Cintas como La isla (2000), Mala gente (2001) y Hierro 3 (2004) gozan de una visión artística de la violencia que lo llevó a consagrarse como un ícono en la industria cinematográfica, mientras que las acusaciones de abuso sexual que una actriz le adjudicó en 2017 por el rodaje de Moebius (2013) y las posteriores denuncias de otras tres, lo posicionaron en el centro de los medios de comunicación y las críticas de las adherentes al movimiento #MeToo.

“El mismo Kim podría ser una figura más prominente si no estuviera involucrado en esa controversia”, dice el columnista Peter Bradshaw en un artículo de The Guardian, quien opina que “hizo películas impactantes, escabrosas y violentas, pero también a menudo inquietantemente tristes, sumamente hermosas y a veces simplemente extrañas, extrañamente hipnóticas”.

Si bien, sus cintas no son recomendables para todo tipo de espectador, Bradshaw asegura que “sabía cómo escenificar la violencia y estaba interesado en el cristianismo y la vida del espíritu: sus filmes tenían un rebelde budismo punk que era todo suyo”.

A continuación encontrarás tres títulos de Ki-duk que podrás ver de manera gratuita y en la web.

La isla (2000)

Estrenada en el Festival Internacional de Cine de Venecia, este drama sigue a Hee-jin, una mujer que alquila pequeñas casas flotantes a la orilla de un lago y que durante las noches se ofrece como prostituta para los pescadores que llegan al recinto, además de suministrarles alimento para su estadía.

Un día, un fugitivo que acaba de matar a su amante, llamado Hyun-shik, llega al lugar con la intención de suicidarse, acción que ella impide y que de a poco va forjando un lazo emocional entre ellos.

Según The Guardian, las escenas de la película son tan fuertes que “atraen a la gente con hermosos paisajes lacustres, solo para enviarlos a vomitar”, debido a que incluye tanto escenas de defecación como otras altamente sangrientas y centradas en el masoquismo con utensilios tan comunes como cañas de pescar.

Ver en: Youtube.

Primavera, verano, otoño, invierno ... y primavera (2003)

El filme cuenta la historia de un monje budista y su aprendiz, quienes viven en un monasterio que flota en un lago entre medio de las montañas. Cada una de las estaciones representa a una época en la vida del último, quien debe enfrentar las consecuencias de sus errores, hasta que años más tarde y después de haber cumplido condena por ellos, asume la posición de su maestro.

La cinta fue galardonada en los certámenes Grand Bel, Chlotrudis, Blue Dragon y San Sebastián, entre otros, mientras que el crítico de cine, Roger Ebert, la describe así en su sitio web:

“Por su belleza y serenidad, se vuelve seductora y fascinante; aceptamos el lago como el centro de la existencia. El protagonista de esta película es la vida y los antagonistas son el tiempo y el cambio. No es tan simple, porque para estar vivo, debes aceptar a ambos oponentes”.

Ver en: Youtube.

Arirang (2011)

Esta obra consiguió el premio Un Certain Regard del Festival de Cannes en 2011, una distinción que destaca propuestas originales y novedosas en el ámbito del cine. Su título alude a una canción homónima al filme que despierta las emociones más profundas del director, quien comparte su catarsis interna con la audiencia en el formato de un diario documental.

Peter Bradshaw —quien también fue parte del jurado en el certamen— la describió como “la pieza más extravagantemente autoindulgente que se puedan imaginar” y como “una muestra de experimentalismo que está en desacuerdo con las convenciones”.

Por otro lado, The Hollywood Reporter la reseñó como “una producción unipersonal en la que Kim mantiene una profunda conversación consigo; su sombra, imágenes grabadas de sí mismo y extractos de sus actuaciones en la pantalla, son tan impresionantes que hacen que Glory to the Filmmaker! (2007) de Takeshi Kitano parezca modesta”.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.