El punto de quiebre entre Vallejo y Boric

<P>La relación con el movimiento estudiantil y el <I>establishment </I>concertacionista se ha convertido en la principal diferencia de los más probables candidatos a ganar la presidencia de la Fech en las elecciones de la próxima semana.</P>




Pasadas las nueve de la noche del miércoles, un grupo de alumnos del Instituto de Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile afinaba algunos detalles en un estudio de televisión. Se trataba del lugar desde donde, minutos después, se transmitiría vía internet un debate entre los nueve postulantes a la presidencia de la Fech, para las elecciones que se realizarán el próximo lunes y martes.

Cuando el foro estaba por comenzar, los candidatos permanecían en el patio. Ensayaban y repasaban sus ideas con sus equipos. "¿Llegó Camila? ¿Irá a venir?", preguntó una productora. "Si no llega empezamos igual", respondió otra estudiante. Minutos después apareció Vallejo y tras un breve paso por una de las salas acondicionadas para los candidatos, ingresó al estudio de grabación.

El formato otorgaba intervenciones de uno o dos minutos como máximo a los postulantes, lo que hacía infructuoso el debate. El momento más tenso lo protagonizó Vallejo, quien interpeló al egresado de Derecho y representante de la lista "Creando izquierda", Gabriel Boric, quien, según los cálculos internos de la Fech, aparece como su rival más fuerte.

"¿Por qué ustedes dicen que son los comunistas los que llevaron la discusión al Parlamento, cuando fue una decisión que se discutió en el pleno y ustedes estuvieron de acuerdo?", preguntó Vallejo.

"Lo que hemos criticado es la tesis de cómo avanzar en el movimiento. Lo que han dicho. El presidente del PC, Guillermo Teillier, que ha ofrecido pacto de gobernabilidad a la Concertación", respondió Boric.

"No me respondiste la pregunta", replicó la presidenta de la Fech, ya algo molesta con el diálogo.

La relación con el establishment concertacionista es el punto de quiebre de ambos candidatos.

Candidata del PC, que ha forjado una alianza programática y electoral con la oposición, Vallejo ahondó en ese factor en el debate. "No basta con decir que la Concertación es mala. Eso saca muchos aplausos. El tema es cómo hacer que el próximo gobierno no siga profundizando en el modelo". Se trata, según ha dicho la dirigenta, de que el movimiento debe tener "vocación de poder".

En una posición más cercana a la de los grupos "ultra", que se autodefinen como apartidistas, Boric plantea que el movimiento no debe ser una convergencia "que abra camino a Bachelet, que será la candidata de la oposición y que no ha dicho palabra sobre el conflicto".

Luego de cantar el jueves, en el cierre de la campaña de Vallejo en la Facultad de Ingeniería, el ex prisionero Claudio Narea, como un fan más, solicitó fotografiarse con la candidata. Entre las 8 y 9 de la mañana la dirigenta comienza el día: su primera actividad es analizar los foros o trabajos en terreno programados. Los trasnoches son frecuentes.

Más de 100 personas trabajan en la campaña, que -según aseguran en su equipo- ha sido la más dura del último tiempo. Un rol central ha jugado Julio Sarmiento, ex presidente de la Fech, especialmente en los énfasis en los discursos. También han participado militantes del PC. Este año, la estructura partidaria ha estado más atenta: la dirigenta es uno de los principales activos del partido. Hasta el diputado Hugo Gutiérrez participó en una cena para recolectar fondos.

La campaña de Boric ha efectuado un fuerte despliegue audiovisual, en las redes sociales y también reúne a cerca de 100 colaboradores. Igualmente, han realizado eventos para financiar la campaña, pero su fuerte son las llamadas "pasadas por sala", donde explican a los alumnos su proyecto. La rutina se inicia a las 6 ó 7 de la mañana, cuando comienzan a pegar afiches y a preparar la jornada.

En su campaña, los candidatos de las dos listas han intentado marcar algunos ejes de sus campañas. Es ahí donde, con matices, tanto Vallejo como Boric tienen amplias coincidencias.

La dirigenta ha planteado que en lo que queda del año y en 2012, las movilizaciones deben continuar, pero dosificando la asistencia a clases. Se trata de una de las críticas a su gestión: el llamado a las tomas y el posterior referéndum con que los universitarios finalmente decidieron volver a clases, debilitó las relaciones entre los alumnos. Vallejo también está a favor de que el movimiento incluya a otras organizaciones sociales y gremios, como las universidades privadas.

Boric ha planteado un discurso similar, pero cree que en el último cambio de gabinete, el gobierno se "reordenó", comenzó a manejar la agenda y los estudiantes quedaron off side.

En la Fech señalan que la debilidad de la candidata del PC en esta elección pasa por la escisión del PC con grupos que la apoyaron en la elección de 2010 -donde triunfó por un margen de 79 votos, de un total de 8.940, y la gran cantidad de postulantes de izquierda, que podrían quitarle votos. En el caso de Boric, su movimiento tiene poca representatividad en la federación, pese a que ha capturado una buena parte del electorado.

Pese a las convergencias, las críticas han sido cruzadas durante la campaña. La lista de Vallejo acusa al grupo que encabeza Boric -los llamados autonomistas- de formar parte de la actual mesa directiva de la Fech y, por lo tanto, de las decisiones que hoy critican.

El estudiante de Derecho y sus partidarios, en tanto, han planteado que Vallejo descuidó la gestión en la Fech por el protagonismo que adquirió en el movimiento estudiantil y le achacan falta de mano política.

Como sea, los 10 días que habitualmente duran las campañas para encabezar la Fech se han extendido este año a tres semanas y no pocos creen que el resultado es aún incierto.

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