El Barça de Setién: más posesión, menos gol

Ernesto Valverde ya es parte del pasado del Barcelona. Pese a que en sus dos temporadas y media ganó cuatro títulos, nunca terminó de convencer al exigente ambiente culé, acostumbrado al fútbol lírico. Después de la eliminación en la Supercopa, a manos del Atlético, la paciencia se agotó y fue despedido. Lo reemplazó Quique Setién, con la ilusión de retomar el ADN Barça. El cántabro lleva un mes en el cargo y ya se pueden percibir cambios respecto al estilo que trata de imponer.

La Tercera hizo el ejercicio de revisar las estadísticas de los siete primeros partidos de Setién y los últimos siete de Valverde. La comparación deja cosas interesantes.

El actual estratega culé es un fanático declarado del estilo del Barça. El viernes, en la previa al duelo con el Getafe, dijo: "La emoción por entrenar al Barcelona es casi la misma que cuando conocí a mi mujer".

En su debut ante el Granada (19 de enero), los catalanes tuvieron el 82,6% de posesión, el mayor porcentaje del equipo en la liga española desde 2011, con Pep Guardiola. En promedio, el Barça de Setién tiene el 73,3% de posesión, superando el 62,6% de los últimos duelos de Valverde. En este ítem, lo más bajo de la etapa anterior fue ante la Real Sociedad (14 de diciembre): 46,7%.

Setién pregona que lo primero es el balón. La cantidad de pases aumentó con el ex DT del Betis. El promedio es de 796 por partido, 127 más que la última etapa de Valverde. La máxima expresión de esto fue también ante el Granada, partido en el cual dieron 1.005 pases, con un 91,6% de efectividad.

Lo curioso de esta revisión es que el Barcelona, con ambos entrenadores, muestra la misma cantidad de remates totales: 14. La diferencia, mínima, a favor de la etapa de Valverde es que en tiros al arco suman uno más en promedio: 7-6. En goles, gana Valverde 17-13.

La participación de Arturo Vidal con ambos técnicos es similar, porque el Rey ha sido titular tres veces en siete juegos con cada DT. Pero con Valverde sumó 387', más que los 244' con Setién.

El Barça ha debido enfrentar vicisitudes. Desde las bajas por lesión de Suárez y Dembélé, reduciendo sus opciones en ofensiva; hasta la polémica entre Messi y el director deportivo Éric Abidal, luego de una entrevista del exjugador, en la que apuntaba al plantel tras la salida de Valverde. Esas oscilaciones también repercuten en la cancha, en la búsqueda de Setién por darle matices a su equipo y probando fórmulas pese a las bajas.

Por ello, ha usado el esquema 3-5-2 en algunos partidos, como ante el Ibiza, por la Copa del Rey, y ante el Valencia, por La Liga. Sorprendió también ubicando a Sergi Roberto como zaguero y a Ansu Fati como lateral-extremo. Luego volvió al tradicional 4-3-3 y en la última presentación contra el Betis pasó al 4-4-2, con Vidal siendo la punta del rombo del mediocampo, detrás de Messi y Griezmann.