Colo Colo le gana la demanda a La Serena, que exigía casi $100 millones por la formación de Juan Carlos Gaete

Juan Carlos Gaete se transformó en una pesadilla en Colo Colo. El delantero, que fue figura en Cobresal, nunca pudo validar su rendimiento en su arribo al Cacique. A tal punto, que al poco tiempo de recalar en Macul, el propio delantero pidió salir del Monumental para volver a sentirse feliz.

Su traspaso al equipo capitalino, sin embargo, le trajo problemas a Blanco y Negro. La Serena demandó a Colo Colo al Tribunal de Asuntos Patrimoniales de la ANFP exigiendo el pago de los derechos de formación del jugador, a quien aseguran haber tenido como aficionado desde el 1 de enero de 2009, siendo inscrito en la ANFP. El 7 de marzo de 2012, el jugador fue transferido al Club Magallanes, y posteriormente a Santa Cruz. El jugador habría firmado contrato con este último el 26 de junio de 2016, considerándolo como club formador.

Frente a tal escenario, en la Cuarta Región le exigían al Cacique el pago de USD $ 95.424,54 (casi $100 millones). “En virtud del artículo 44 del Reglamento de Fútbol Joven y el artículo 152 bis E del Código del Trabajo, afirmó que tenía derecho para exigir de Colo Colo el pago de la indemnización relativa a los costos de formación del jugador entre el 1 de enero de 2009 y el 7 de marzo de 2012, lo que alcanzaría los USD $ 95.424,54″, dice el escrito.

Tres años después la disputa llegó a su fin. Jorge Carrasco, el abogado del Cacique, y Santiago Montes, de La Serena, expusieron y presentaron sus argumentos en diferentes alegatos. Y con papeles en mano, el tribunal patrimonial de la ANFP rechazó la demanda de CD La Serena, en que exigía el cobro de derechos de formación de Gaete.

Según consigna el documento, el club al que le correspondía pagar estos derechos de formación sería Santa Cruz y no Colo Colo. La sentencia rechazó en todas sus partes la demanda de La Serena en donde incluso para fundamentar su petición, alegó incluso que el jugador tenía problemas mentales, lo que fue rechazado por el Tribunal. Así lo deja claro en el fundamento octogésimo octavo, del documento que tiene más de 40 páginas. “Que no puede alegarse que el jugador estaba con problemas mentales, porque esto es propio de jugadores tanto aficionados como profesionales”, dice una de las respuesta a los alegatos de la parte demandante.