Manifiesto de Mile Mavroski, mago y dueño librería Mil Aires: "Se nos ocurrió la campaña de los libros sin IVA para reactivar la pyme y ayudar a nuestros clientes"

Foto: Patricio Fuentes

Con el estallido social hemos sufrido mucha ansiedad. No es lo mismo estar acá que donde realmente está quedando la escoba, como en Valparaíso. Pero tengo clientes que han sufrido y cuando te cuentan las cosas, te afecta. Se siente en el ambiente: es tema de conversación todo el rato. Así que yo trato de hacer mi show de magia con los niños y desconectarlos tanto a ellos como a sus padres, porque estamos todos llenos de problemas.


Cuando nací, mi papá estaba detenido desaparecido. De hecho, es el único testigo vivo de que en Villa Baviera se torturaba. Él, macedonio, llegó escapando de la Segunda Guerra Mundial, pero en el 73 lo detuvieron por su apellido: dijeron que era ruso y que escondía armamento. Pese a todo, nunca, nunca nos inculcó odio o resentimiento.

Mi vida en Inglaterra fue un sueño. Con mi esposa fuimos de vacaciones por un fin de semana y nos quedamos cinco años. Vivíamos en Notting Hill y yo trabajaba en el hotel de la película. Mi esposa trabajaba en la librería, era como la película. Tengo una foto arriba de la mesa, justamente donde Julia Roberts le hace la entrevista a Hugh Grant. Trabajando en el hotel, compartí con Johnny Depp, con el Presidente Clinton. Me pedían siempre que les hiciera magia.

Tenemos la librería desde hace 14 años. Vinimos con la idea desde Inglaterra y tratamos de copiar ese modelo, de cambiar la puesta de escena de los libros en Chile. Antes éramos full arte y arquitectura, y hoy día tenemos muchos libros infantiles. Faltaba un lugar más familiar y tratamos de rescatar eso. Nos enfocamos en los niños, porque necesitan tocar el papel, hay que atacarlos con los libros desde chiquititos.

Estuve en coma más de 10 días tras un accidente en moto. Tengo operaciones en la cabeza, estuve a punto de morir. Ahí cambió todo: yo era matemático, pero después del accidente se potenció mi lado artístico. Me lancé a la música, trabajo de mago; he actuado en algunas obras y tenemos la librería donde hacemos de todo.

Se nos ocurrió la campaña de los libros sin IVA para reactivar la pyme y ayudar a nuestros clientes. Hay muchas personas que van a perder sus trabajos, que están en ascuas, proyectos que se han caído, porque el estallido social ha sido como un efecto dominó. El tema del comercio se frenó demasiado durante este mes y nosotros somos una librería familiar, independiente, así que la campaña nació para reactivar esto.

Con el estallido social hemos sufrido mucha ansiedad. No es lo mismo estar acá que donde realmente está quedando la escoba, como en Valparaíso. Pero tengo clientes que han sufrido y cuando te cuentan las cosas, te afecta. Se siente en el ambiente: es tema de conversación todo el rato. Así que yo trato de hacer mi show de magia con los niños y desconectarlos tanto a ellos como a sus padres, porque estamos todos llenos de problemas. He visto a niños chiquititos con estrés. Trato de hacerlos sentir mejor.

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