La compleja tarea de Boric para designar delegados presidenciales, un cargo con fecha de expiración

El presidente electo agendó una reunión con los gobernadores regionales para el 12 de enero, con el fin de retomar las conversaciones para cumplir una de las promesas de su programa: la eliminación del cargo del delegado presidencial. Pese a esa intención, en el círculo del futuro mandatario están conscientes de que tendrán que nombrar a las personas que ocupen ese puesto, búsqueda que -reconocen- aún no logran empezar.


“Aún no hay nadie haciendo esa pega”. Eso reconocían durante estos días en el equipo del presidente electo Gabriel Boric respecto de la búsqueda de los 16 nombres que también tendrán que designar antes del 11 de marzo: los delegados presidenciales.

Luego de que el diputado derrotara a José Antonio Kast con una amplia mayoría, los esfuerzos del equipo presidencial se han concentrado en los preparativos para el cambio de mando y en el reclutamiento de nombres para el gabinete, cupos que anunciarán cerca del 20 de enero.

Sin embargo, en el círculo del diputado por Magallanes están conscientes de la complejidad que existe para encontrar a quienes ocupen el cargo que reemplazó a los intendentes. El problema es que el futuro gobierno anunció previamente su determinación de eliminar la figura del delegado presidencial y avanzar con el traspaso de competencias hacia los gobernadores regionales.

Pese a esa determinación, en el círculo de Boric saben que no pueden dejar ese cargo vacío y, por lo tanto, están obligados a iniciar esa búsqueda. De hecho, en la coalición aseguran que desde el equipo presidencial han transmitido que el plazo que manejan para dar a conocer los nombres de quienes asuman ese desafío es “después del 20 de enero”.

Con ese fin ya tomaron un compromiso con los gobernadores. En el equipo presidencial aseguran que su plan es consultarles a las autoridades regionales y coordinarse con ellos para designar a los delegados. Para eso, Boric agendó un encuentro con los gobernadores con fecha para el 12 de enero, en Santiago. El objetivo de esa reunión, sostienen en el comando, es retomar las conversaciones con esas autoridades con el fin de seguir coordinando la eliminación del cargo y el traspaso de competencias.

No obstante, entre los gobernadores en ejercicio aseguran que quien llegue a ser nombrado en el puesto del delegado deberá cumplir con un perfil en particular: que colabore en la eliminación de su propio cargo. “La designación del nuevo delegado presidencial debe tener como principal objetivo ser un facilitador en profundizar este proceso, de que los gobernadores sean quienes tengan todas las competencias de coordinación de servicios públicos a nivel regional y, por cierto, el delegado presidencial colabore en la eliminación de la figura”, asegura el gobernador de Tarapacá, José Miguel Carvajal (Comunes).

Y agrega: “Tenemos muchas expectativas y queríamos a propósito de la reunión que vamos a sostener con el presidente electo saber los tiempos que se van a necesitar para terminar con esta figura, pero entendemos todos que va a haber un nombramiento y entendemos todos que lo óptimo sea que esto se converse con los gobernadores y que sea con el espíritu de terminar con una figura designada a nivel central”.

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