Llega a Chile la primera tienda manejada por inteligencia artificial

La empresa Aramark, en asociación con Mastercard, instaló un minimarket en la Clínica Alemana que funciona de manera totalmente automatizada y autónoma.



Buscar, comprar y pagar sin tener que interactuar con máquinas ni personas, escanear nada ni perder minutos valiosos. Esa es la apuesta de la nueva tienda que Aramark, bajo la marca Quick Eats, acaba de inaugurar en la Clínica Alemana. Una tienda de alimentos que estará abierta las 24 horas al día y los siete días de la semana, y a la que los clientes pueden acceder con sólo descargar una aplicación en sus teléfonos inteligentes.

Ari Bermann, Vicepresidente de Crecimiento, Sostenibilidad y Desarrollo de Aramark Latinoamérica, explica las ventajas de esta apuesta: “Que una persona abra la puerta de la tienda a través de una app, saque el producto que quiera y simplemente salga del local, para que luego automáticamente se cobre su compra, es algo que por primera vez se ve en Chile”, resume, y agrega que “como empresa, creemos en la innovación y en que debemos experimentar hoy con servicios del futuro para avanzar en más comodidad, flexibilidad y ahorro de tiempo”.

Mientras que Luis Angulo, coordinador de innovación y tecnología de la Universidad San Sebastián, valora que esta primera apuesta se haya instalado en esa locación. “La base de una innovación es que va a ser valorada en un contexto”, opina y agrega que “debe ser claro que no es tecnología por tecnología y en este caso, gracias a la atención 24/7 en una clínica, está bien pensado”.

Este nuevo local funciona a través de inteligencia artificial, con cámaras aéreas y sensores de estantes inteligentes, que combinan tecnologías de detección, cognición visual y una integración de pago seguro con los espacios que manejan información en tiempo real.

Esta innovación fue posible gracias a la tecnología provista por Mastercard, a través de su plataforma Shop Anywhere. “Esta alianza y esta tecnología tienen el potencial de cambiar para siempre la forma de comprar de los chilenos. Innovaciones como esta nos inspiran a seguir satisfaciendo las necesidades de los consumidores, que tienen un ritmo de vida cada vez más rápido”, apunta Patricio Sandoval, Country Manager Mastercard Chile & Paraguay.

Angulo aporta una visión de por qué Chile es una locación ideal para probar innovaciones. Por una parte, esto se debería a que el país tiene un volumen de transacciones muy grande en relación a su población. “Se necesita también una seguridad que esté a la altura de lo que estamos acostumbrados. Por eso es bueno que se hayan aliado con el Shop Anywhere que tiene Mastercard, que da esa seguridad”, opina el académico, quien agrega que “hay que asumir que la tecnología evoluciona constantemente y son las personas las que la validan. Somos los usuarios los que vamos a validar o descartar esta nueva manera de comprar. Y dentro de ello, son muy valoradas las experiencias”.

En cuanto a la proyección de esta tecnología a otros tipos de negocio, Angulo opina que al principio hay que ir de a poco. “Esto tiene que ver no sólo en rubros sino sectores y ubicaciones. En una primera etapa el nivel de concurrencia no puede ser tan alto, porque la inteligencia artificial, para que resulte, tiene que ir aprendiendo. En ese sentido es muy acertada la dimensión de esta alianza”, dice.

“Esperamos que esta tienda sea un servicio muy útil para los pacientes, sus familiares y también nuestros colaboradores, los que contarán con una alternativa siempre disponible para adquirir lo que necesiten, independiente del horario o día”, asegura Rodrigo Croquevielle, gerente de operaciones de Clínica Alemana, organización comprometida con avanzar en la transformación digital de manera integral.

Claro que tanta automatización y autonomía no vaticina la desaparición de la interacción humana, sino que, más bien, se transformará en un complemento. “No veo que el desarrollo tecnológico vaya a la desaparición de las personas. Lleva a la mayor valoración de la experiencia. Incluso aunque la automatización conduzca, en el largo plazo, a que sea más barato para el cliente cuando se masifique”, explica Angulo y detalla: “Otras personas tendrán disposición de hacer un pago mayor porque están valorizando a las personas, por ejemplo, como en los restaurantes. Es la experiencia. A medida que se automatizan ciertos procesos, hay que profesionalizar a las personas para mejorar otros. Hacer lo contrario sería un gran error”.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.