"Lo buscamos durante un año", cuenta Mauricio Magnasco, hasta que lo encontraron. Frente a  uno de los pulmones más grandes de Santiago, el Club de Golf Los Leones, está el que ahora es su departamento y al que llegó junto a Javiera Edwards. Grande, luminoso y extremadamente rico, como diríamos de manera sencilla. Es cosa de escucharlos y ver la alegría que irradian, y que pasan los días de manera generosa, organizando fiestas, invitando a los más cercanos y celebrando. Lo que sea, para pasarlo bien. "Siempre me ha gustado armar cosas, hacer fiestas producidas, con 30 o 40 personas", cuenta Mauricio, a lo que Javiera aclara que los servicios de comida se externalizan, "no somos buenos para cocinar", dice con la sonrisa puesta.

La lámpara que cae sobre la mesa del comedor fue comprada por ambos en Hommy antes de conocer el departamento.

Fue en noviembre del 2010 cuando se decidieron por  este departamento de 160 m². Comenzaron por remodelarlo; parte de esto fue que tuvieron que igualar el piso y ponerle parqué a todo. "Nos dimos ese gusto", afirman, y tardaron solo tres meses en dejarlo como querían. El lugar contó con un proyecto integral armado por ambos; mal que mal, los  conocimientos de arquitectura los ayudaron a aprobar un examen de grado diferente y mucho más personal, con distinciones. Lograron una conexión perfecta del exterior con el interior, con un entorno que se cuela sabiamente a través de grandes ventanales, dentro de un edificio que tiene vista asegurada de por vida. El lugar se pensó en dos ejes, uno público, donde están el living, comedor y cocina, y el otro que se forma con la pieza principal, que tiene unos detalles inspirados en el hotel Standard de Nueva York y responde al carácter más íntimo de ellos.

A los dueños de este departamento les gusta viajar; por lo mismo, muchas ideas, como la tina del baño, fueron sacadas de un viaje que hicieron a Nueva York.

Escritorio.

Dentro de la pieza principal está este amplio escritorio junto a una fotografía tomada por Mauricio.

En el living se puede disfrutar de un cómodo sofá inspirado en el modelo Shanghai Tip  de la firma italiana Moroso.  De fondo, una foto sacada por Mauricio en Formentera, cerca de Ibiza.

Son jóvenes y van por lo bueno, por lo amplio, saben que esta vida no para y, como dicen casi todos, pasa rápido, por lo mismo la disfrutan a mil y el espacio de ambos fue pensado para  esto. Simple.

El papel mural del pasillo que une los dos grandes espacios o ejes del departamento fue encargado a Canadá.

INSPIRACIÓN