Robert Prevost es el nuevo Papa, líder de la Iglesia Católica, y ha elegido el nombre de León XIV, quien se convierte en el primer Santo Pontífice estadounidense.

Así lo dio a conocer esta jornada el cardenal protodiácono, el francés Dominique Mamberti, quien como indica el protocolo, se asomó del balcón de la Basílica de San Pedro para dar este anuncio junto con el “Habemus papam”.

Esto, previo a que el nuevo pontífice impartiera su bendición “urbi et orbi” (A la ciudad y al mundo).

Tras dos días de votación, el humo salió finalmente blanco esta tarde en Roma tras la tercera votación del Cónclave, conformado por los 133 Cardenales, indicando que el sucesor de Francisco había sido finalmente elegido.

Concluido el rito de aceptación, se queman todas las papeletas y demás documentos utilizados para la elección. El Papa electo sale de la Capilla Sixtina y entra en la llamada “Sala de las Lágrimas”. Aquí, con la ayuda del Maestro de las Celebraciones Litúrgicas, se quita el hábito cardenalicio, se pone uno de los tres hábitos papales ya preparados y se reúne en oración durante unos minutos.

Después de ello, se realizó la primera ceremonia, luego un homenaje donde todos los cardenales desfilan ante el nuevo Santo Padre para manifestarle su respeto y obediencia. Luego todos juntos cantan el himno “Te Deum”, cantado por el recién elegido Papa.