Santiago todavía se agita en el período más intenso de la cartelera musical de este año -con una semana repartida entre Rihanna y Queen y días venideros donde pasarán desde Katy Perry hasta Sting-, pero los productores ya tienen su agenda enfocada hacia 2016. De hecho, por estas semanas se cierran nombres y se resuelven itinerarios para empezar a dar cuerpo a la programación en vivo del próximo año.

En esos plazos, el festival Lollapalooza Chile, que se hará los días 19 y 20 de marzo, será el primero en correr el telón: la cita de Parque O'Higgins revelará este martes 6 la totalidad de su cartel para su nueva versión. En ese listado, el cantante estadounidense Eminem, el rapero blanco más popular de la historia, ya acordó su escala en la región para el próximo año y asoma como carta segura para liderar el espectáculo, lo que concretará su debut en escenarios locales. Su nombre se baraja por parte de los organizadores desde hace varias ediciones, pero sólo a mediados de 2015 se cerró la posibilidad de que se presentara en Santiago y las otras dos réplicas que posee el espectáculo en Sudamérica (Buenos Aires y Sao Paulo).

Por lo demás, los acercamientos con el hombre de The real slim shady se vieron facilitados por sus fuertes vínculos recientes con Lollapalooza, ya que en 2011 y 2014 lideró la edición madre que se monta en Chicago. De cerrarse su paso por el festival, el originario de Detroit ofrecerá un cruce entre sus mayores hits y los temas de su último disco, The Marshall Mathers LP 2 (2013), el que estableció su vuelta a la primera plana.

Otros nombres que podrían aterrizar en Lolla Chile son la banda inglesa Florence and the Machine, en pleno suceso comercial gracias a su última entrega, How Big, How Blue, How Beautiful (2015); los británicos de Noel Gallagher's High Flying Birds, el nuevo proyecto del ex líder de Oasis, y los estadounidenses Alabama Shakes, otro crédito en plena bonanza y que ya estuvo en la cita local de 2013. En los últimos días también se ultiman los invitados chilenos que se sumarán al line-up, contingente donde destaca Gepe (ver recuadro). De manera preliminar, la nueva entrega del festín musical busca acentuar su perfil más actual y contemporáneo, con una gran cantidad de figuras que han irrumpido en el nuevo siglo.

Por otro lado, para los próximos días se estima la oficialización del retorno de Iron Maiden a la capital, show pactado para marzo y que tiene al Estadio Nacional -por donde han pasado en 2011 y 2013- como su apuesta más segura.

En tanto, una productora de alcance continental negocia desde mediados de este año el esperado retorno de los ingleses Coldplay, sobre todo luego de cancelar de manera repentina el tour que harían en 2013 por el sur. El nombre de los autores de Yellow ya está en carpeta de la empresa y  por estos días el desembarco afina su ruta definitiva para un lapso que va de marzo a mayo del próximo año, en el que tienen contemplado aterrizar, hasta ahora, en Chile, Argentina, Brasil y Colombia.

En sueño nacional, será un recital en solitario y, según las primeras estimaciones, en un recinto de alta convocatoria. De cerrarse su venida, el anuncio se difundirá en las próximas semanas. Además, el conjunto de Chris Martin materializaría su segunda vez en el país luego de su debut de 2007.