Guede tiene a los médicos en la mira

En el Monumental se desayunaron ayer con la noticia de que el arquero Justo Villar tendría que operarse. El paraguayo sufrió una nueva lesión en la rodilla izquierda, esta vez en los meniscos, por lo que hoy será intervenido quirúrgicamente.

El técnico Pablo Guede se lamenta. Su portero estrella se perderá el resto del Torneo de Clausura. Y puede que más. Todo dependerá de la gravedad de la dolencia, la que recién se conocerá durante esta jornada.

"El tiempo de recuperación de Justo se calcula en dos meses y medio. Ahora, puede ser más. Al momento de la cirugía evaluaremos la real situación del ligamento cruzado posterior, que es lo que nos preocupa, para que no se genere un fallo en el futuro. Tendremos que tomar decisiones durante la misma operación", explicó Wilson Ferrada, kinesiólogo de Colo Colo.

Lo del meta es uno de los tantos casos de lesionados que afecta al Cacique, seguidilla que ha atormentado al entrenador argentino este 2017. Al propio guaraní se le suman Pedro Morales, Luis Pedro Figueroa, Esteban Pavez, Fernando Meza, Michael Ríos, Matías Zaldivia y Marcos Bolados, quienes sufren actualmente problemas físicos de distinta índole. Otros, como Octavio Rivero y Mark González también se han visto aquejados por dolencias, pero ya están recuperados.

Según revelan en el club, esta situación ha tensionado la relación entre Guede y el cuerpo médico de la institución. Este vínculo se ha venido deteriorando en el último tiempo, justamente, a raíz de esta seguidilla de episodios en el plantel. El transandino reconoció que es un tema que ha analizado.

"No me gusta que se lesionen los futbolistas, menos él (Villar). Jode, la palabra es que jode. Lo analizamos. Hay lesiones que no las puedes evitar, la gran mayoría. Son cosas que no puedes evitar, también por la alta intensidad con que entrenamos (...) Esto afecta, porque no me gusta que se lesionen los futbolistas. A uno, como entrenador, le gustaría tener a todos disponibles", se lamentó el estratega ayer en Pedreros.

Según cuentan en el Monumental, la principal crítica del ex DT de Palestino y San Lorenzo apunta a la demora en la recuperación de los lesionados, labor que atañe, principalmente, a Ferrada, el kinesiólogo.

Uno de los casos que más le ha causado extrañeza es el de Pavez. El volante sufrió un desgarro de 1,8 cms. en el gemelo izquierdo el 25 de marzo, es decir, hace más de un mes, pero aún no se recupera. "Sigue entrenando con Wilson. Conmigo no. Lleva toda la semana entrenado con Wilson en la recuperación habitual que hacemos. Se lesionan, lo tratan, hacen la primera parte con los kinesiólogos, una readaptación al trabajo y ya creo que la semana que viene lo tendré. Que tenga suerte", ironizó el DT.

Eso sí, según confidencian en el Monumental, hay molestia en el cuerpo técnico con el mediocampista. "No llegó en el mejor estado a la práctica del martes. Y como está lesionado, debe cuidarse", dice una fuente del club, donde sospechan que el jugador trasnochó el lunes.

Y así como los dardos de Guede y compañía apuntan a la "tardanza" del cuerpo médico en recuperar a los lesionados, desde la otra vereda señalan que la gran cantidad de lesionados se debe a la intensidad y cargas de las prácticas (algo que reconoce el DT), al trabajo físico del staff y a decisiones desafortunadas del propio DT, como ocurrió con Figueroa. "Ahí podría ser una negligencia mía, porque lo apuré para que jugara, por suerte no se rompió", dijo.