“Los últimos momentos felices”: fotógrafo revela imágenes de festival musical en Israel antes del ataque de Hamas

El festival Tribe of Nova en Israel planeaba ser la instancia en que miles de personas pudieran disfrutar de la música electrónica y otras actividades de distracción al aire libre.

Sin embargo, la celebración se convirtió en un infierno durante la madrugada del 7 de octubre. Mientras varios asistentes continuaban bailando al ritmo de la música a esas horas, miembros del grupo militar Hamas aparecieron repentinamente en el lugar, realizando ataques sin piedad alguna. Alrededor de 260 personas fueron asesinadas y otras permanecen secuestradas o desaparecidas.

Quien asistió al festival pero logró escapar a tiempo de Hamas fue un fotógrafo llamado Shye Weinstein.

Recientemente, Weinstein compartió en sus redes sociales una serie de imágenes que tomó en Tribe of Nova antes de la masacre sin precedentes. En los registros, que el fotógrafo de 26 años llamó “los últimos momentos felices”, se puede observar a varios jóvenes disfrutando y riendo como en cualquier otro evento de música, sin imaginar que una tragedia se acercaba.

Según relató el fotógrafo a People, inicialmente ir al evento no estaba contemplado entre sus planes. Sin embargo, a última hora se animó a asistir junto a sus amigos y su primo.

“Iba a ser mi primer festival”, expresó Weinstein al medio estadounidense. “Pensé: ‘¿Por qué no tener esa experiencia y estar con mi primo y mis amigos?’ Será divertido”.

El joven no quiso perder la oportunidad de llevar su cámara al desierto de Neguev, donde se desarrollaría Tribe of Nova. Si bien quería disfrutar de la música, también deseaba capturar a través del lente los buenos momentos que pasara junto a su grupo y otros asistentes.

Durante toda la noche, hasta la madrugada, Weinstein estuvo capturando imágenes de recuerdo. Poco después de las 6 de la mañana comenzaron a oír ruidos de cohetes, particularmente en la zona que estaba más próxima a la frontera con Gaza. En esos instantes tampoco dejó de lado su cámara.

“En el momento en que sucedieron los cohetes, supe que algo andaba mal y me dije ‘voy a tomar fotos’”, relató en la entrevista. “No sé por qué, pero pensé que en el momento en que mi primo y yo cambiamos de lugar y yo no conducía, pensé que lo más útil que puedo hacer es tomar fotografías”.

Weinstein dijo que mientras iban arriba del vehículo, “comenzaron a estallar disparos”.

“La novia de mi primo nos grita que bajemos del auto y corramos. Todos nos metimos debajo del auto, nos agachamos en el campo, nos acostamos. Miramos hacia atrás y vimos que la gente ya no podía pasar”. Pese al miedo, el fotógrafo siguió retratando lo que sucedía, incluso con su celular.

Weinstein ha contado en redes sociales que después su primo volvió a donde había dejado el auto, lo recuperó y con mucha suerte pudieron huir. Mientras conducían por una carretera que estaba rodeada de campos y cultivos, vieron a varias personas huyendo a pie. Pese a que les insistieron que se subieran al auto, no quisieron hacerlo.

“Usamos Waze y Google Maps para orientarnos. Vimos gente yendo en bicicleta, coches abandonados, algunos acribillados a balazos, algunos simplemente dejados atrás”, contó.

Pocos días después del ataque, el fotógrafo comenzó a publicar en Instagram las imágenes que tomó. De alguna manera permiten narrar cómo las cosas cambiaron de un momento a otro ese 7 de octubre.

“Esperaba buenas vibraciones y diversión, gente amable; y eso es exactamente lo que obtuvimos. Pero no es todo lo que obtuvimos (...) Si hay personas desaparecidas en estas imágenes, por favor compartan”, describió el fotógrafo en una publicación de Instagram.

La mayoría de las capturas exhibe a personas sonriendo, divirtiéndose y abrazándose junto a otros. Algunos descansan en hamacas o al lado de sus carpas.

“Un tipo al que tomé una foto sólo hablaba de su hermano y de las joyas que hacía. Ahora está desaparecido. Nadie sabe dónde está”, dijo Weinstein. Otra captura muestra a su primo con Ran Scheffer, un joven que conocieron en el festival y que murió tras el ataque de Hamas.

El profesional relata que siempre que recibe un mensaje que avisa que alguien que aparece en sus fotografías está vivo, entra en llanto.

“Quiero que la gente encuentre a sus seres queridos. Si estas personas están muertas, quiero que sus familiares y amigos vean los últimos momentos felices que vivieron porque no quiero ser el último en verlos”, concluyó.