Fidel, el bueno

"Todos los futbolistas tienen un apodo, menos yo. Solo me llamaban Fidel, algunas veces me decían el bueno, porque el otro (Castro) era malulo", sonríe en su casa de La Calera. Fidel Alberto Zuleta Olavarría nació el 1 de diciembre de 1936 en Valparaíso (cumplió 81 años) y se crió en La Cruz. Medía 1,75 metros y pesaba 70 kilos.

Defensa central, actuó en Santiago Wanderers (1955 y 1956), Unión La Calera (1957 a 1962), Audax Italiano (1963 a 1968), Naval de Talcahuano (1969) y nuevamente Unión La Calera (1970 a 1972). Dio dos vueltas olímpicas, con Unión La Calera en el Ascenso 1961 y con Naval en la Copa Isidro Corbinos 1969, de segunda división, luego de vencer en la definición por penales a Ferroviarios. Integró la selección nacional del Conejo Alejandro Scopelli en el Sudamericano de Montevideo 1967, donde fue suplente de Elías Figueroa.

¿Cuál es su partido inolvidable? "Realizaba el servicio militar en el Cuerpo de Defensa de Costa (actual Infantería de Marina) y enfrenté en un amistoso a Santiago Wanderers. Al entrenador José Pérez siempre le gustaron los jugadores rápidos, duros, aperrados, y me seleccionó. En dos años, solo jugué un partido en primera división y de lateral derecho (Estadio Nacional, Santiago Morning 1- Santiago Wanderers 1, en julio de 1956)".

¿Cómo jugaba usted? "Mi fuerte era la velocidad y la anticipación y tuve una carrera con mucha regularidad, porque fui muy sano. Mi única entretención era cazar tórtolas y conejos y salir a pescar".

¿Presenció el Mundial 1962? "Sí y en mi puesto me impresionaron el alemán Schnellinger y el brasileño Mauro".

¿Quién era su ídolo? "Primero fue Raúl Sánchez y después Elías Figueroa, quien se lucía con su elegancia. En el Ascenso fui más rudo y en primera división era más técnico, porque me gustaba salir jugando como ellos".

¿El delantero más difícil que marcó? "Honorino Landa (Unión Española) me hacía pasar rabias, porque era veloz, enganchaba y señalaba goles. Luis Hernán Álvarez (Colo Colo) era complicado. En general los centrodelanteros eran parejos, mientras que los tanques eran peligrosos. Como yo era más liviano, debía evitar el choque y anticipar a Carlos Campos (Universidad de Chile), Felipe Bracamonte (Unión San Felipe) Juan Álvarez y Ricardo Cabrera (Santiago Wanderers)".

¿Los mejores futbolistas que tuvo de compañeros? "René Meléndez (Unión La Calera) y Jaime Ramírez (Audax Italiano) eran maestros. A Carlos Reinoso (Audax Italiano) lo cuidábamos, porque era muy buen jugador. Y con el que mejor me entendí en la cancha fue Sergio Tapia, lo tuve de 6 en Unión La Calera y en Audax Italiano".

¿Un defensa chuletero? "El Flaco Nelson García (Unión La Calera)".

¿Anotó goles? "Debo haber convertido un par: uno de cabeza y uno de rebote. Y debo haberme equivocado en un par de autogoles: recuerdo uno al Tato Luis Pérez (Unión La Calera) y otro a Palitroque Rodenak (Audax Italiano). Fueron devoluciones en las que me apresuré".

Una anécdota. "Colo Colo había solicitado precio a Unión La Calera por Sergio Tapia y por mí, pero arreglamos con Audax Italiano. Íbamos en bus a Santiago a firmar el contrato cuando en el control de carabineros de Los Pasos de Huechuraba nos detuvieron. Eran emisarios de Colo Colo que nos llevaron a la sede de Cienfuegos 41, pero no lograron convencernos. Entonces Colo Colo compró al Chita Cruz y a Hugo Lepe".