El de Huachipato y Palestino fue uno de los partidos que cerró la primera rueda de la Liga de Primera. El encuentro terminó igualado 2-2 aunque, a estas alturas, de lo que menos se habla es de la igualdad entre las escuadras acerera y de colonia.

Lo más llamativo estuvo en el campo de juego del estadio Huachipato, la actual denominación del recinto acerero. La cancha pagó las consecuencias del intenso temporal que cayó sobre la región del Biobío. Hubo zonas anegadas que fueron apreciadas en la transmisión en directo y en todos los compactos del encuentro.

Se jugó en una piscina: el insólito informe arbitral del partido entre Huachipato y Palestino

Que el partido se jugara forma parte de las prerrogativas que tenía el juez José Cabero, el designado para dirigir el compromiso. El juez debió revisar la cancha y determinar que no representaba peligro para la integridad física de los jugadores, el criterio que se aplica en estos casos. Ese procedimiento se realiza, naturalmente, horas antes del inicio del partido.

Lo más llamativo, en todo caso, es un concepto que Cabero ocupa en el informe que debe emitir a las autoridades del fútbol respecto de las condiciones del campo de juego. El árbitro ocupó la calificación ‘buena’ para referirse al estado del piso. No incluyó ninguna observación adicional y tampoco ocupó concepto alguno para consignar alguna irregularidad.

Nadie entendió el fundamento para tan alta consideración, dado que durante el encuentro fueron evidentes las dificultades para el desplazamiento de los futbolistas y del balón, una escena que, de todas formas, no es nueva en el recinto de Talcahuano.

Aunque históricamente el reducto acerero contó con una de las canchas mejor preparadas para la lluvia en el país, desde hace un tiempo que la realización de partidos en esas condiciones termina evidenciando problemas. Hay varios registros que dan cuenta de una cancha que ha perdido una de sus principales cualidades: un drenaje de excepción.