McLaren no deja espacio para las dudas. La escudería papaya volvió a conseguir un sólido un-dos ante la desgracia de Ferrari. Lando Norris se quedó con el Gran Premio de Hungría y lideró el doblete para conseguir su quinto triunfo de la temporada en la Fórmula 1.

El británico volvió a recortar distancia ante Oscar Piastri, que ahora lidera el campeonato del mundo por apenas nueve unidades. El podio fue completado por George Russell (Mercedes), que le ganó la pulseada a Charles Leclerc. El monegasco largó desde la pole y no solo no pudo abrochar su primer triunfo del año, sino que se quedó sin nada en Hungaroring.

McLaren acumula su undécima victoria de la temporada en la F1 (de 14) y han ganado seis de las últimas siete carreras. La escudería papaya no entrega ventajas y hegemoniza la máxima categoría automovilística del mundo.

La debacle de Ferrari

El circuito de Hungaroring amaneció completamente empapado tras una intensa lluvia nocturna, sin embargo, Mogyorod amaneció con el cielo despejado. Pese a que hubo amenaza con la posibilidad de precipitaciones, esto no terminó por ocurrir.

Leclerc largó desde la pole y rápidamente demostró que pretendía que fuera su jornada. El monegasco salió con ritmo y comenzó a enlazar vueltas rápidas. Más atrás lo siguieron Piastri, Russell y Norris. Este último, de hecho, tuvo una pésima salida y perdió un par de puestos, teniendo que luchar para volver a meterse en competencia.

El australiano ingresó a boxes en la vuelta 19 para intentar un undercut sobre el de Ferrari, que entró un giro después. La estrategia de McLaren no se completó. Y si bien Leclerc perdió el liderato, lo terminaría recuperando. Al mismo tiempo, Max Verstappen (Red Bull), notoriamente enojado con su equipo, intentaba recortar distancia. Poco a poco fue sumando, pero parecía imposible alcanzar a los líderes.

Leclerc también manifestó su molestia con sus ingenieros. “Vamos a perder la carrera por estas cosas. Estamos perdiendo demasiado tiempo”, se le escuchó decir al monegasco. Sin embargo, volvió a liderar en la vuelta 33 y siguió con un buen ritmo hasta su segunda entrada en boxes, en la 42. Ahí inició la tragedia. En tanto, Norris determinó jugarse todo a mantener los neumáticos hasta el final. Lo mismo hizo Verstappen para intentar colarse en el top 4. “Es nuestra mejor oportunidad”, se escuchó en el equipo del neerlandés. No obstante, esto no fue posible y el tetracampeón se vio obligado a ingresar, cayendo posiciones y alejándose de la lucha por un posible podio.

La gestión de Ferrari no fue la mejor y les terminó pasando la cuenta ante la diversificación de estrategias de McLaren. Un promisorio panorama terminó siendo un sufrimiento para Leclerc. Piastri rebasó al monegasco y comenzó la pelea con su compañero en el tramo final. El australiano tenía gomas prácticamente nuevas, a diferencia de su compañero, aunque no le alcanzó.

“Esto es increíblemente frustrante. Me tenían que haber hecho caso a mí. Es un milagro si terminamos en el podio”, indicó el monegasco, que terminó cediendo el podio ante Russell a falta de ocho vueltas para el cierre. A esa altura era imposible competir contra el de Mercedes. Ni hablar del mal momento que pasa Lewis Hamilton, que terminó en la duodécima posición. El Cavallino Rampante no encuentra el camino.

Fernando Alonso (Aston Martin), Gabriel Bortoleto (Kick Sauber) y Lance Stroll los siguieron. Mientras que Liam Lawson, Verstappen y Kimi Antonelli cerraron el top 10. El Mundial de la Fórmula 1 continuará con el Gran Premio de Países Bajos, el 31 de agosto.