La última ola de ataques forzó una nueva desconexión de la tomada central ucraniana de la red eléctrica, algo que no ocurría desde noviembre.
9 mar 2023 11:26 AM
La última ola de ataques forzó una nueva desconexión de la tomada central ucraniana de la red eléctrica, algo que no ocurría desde noviembre.
El Organismo Internacional para la Energía Atómica dijo que el miércoles a primera hora del día se detectaron hasta ocho “fuertes detonaciones”.
La ofensiva es una de las más intensas desde que Rusia invadió Ucrania en febrero.
Así lo concluyó un equipo de expertos de Organismo Internacional de la Energía Atómica que examinó los efectos de los ataques del fin de semana, de los que tanto Kiev como Moscú se han responsabilizado mutuamente. No se han detectado daños en los reactores ni en otras instalaciones que puedan poner en peligro la viabilidad de la planta, explicó el OIEA en un comunicado.
Anatolii Kurtiev, gobernador local de la ciudad donde se ubica la central nuclear más grande de Europa, señaló que varias personas podrían haber quedado atrapadas debajo de los escombros, puesto que había empleados trabajando en la infraestructura siniestrada.
Las naciones integrantes del Organismo Internacional de Energía Atómica solicitaron en una resolución conjunta a Moscú que retire a su personal “de inmediato” y que renuncie a “su reclamo infundado de propiedad” de la planta nuclear en el sureste de Ucrania, la más grande de Europa.
A pesar del anuncio que dio a conocer el viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Riabkov, Moscú estaría dispuesto a debatir una zona de seguridad en las inmediaciones de la planta.
El director general del OIEA, Rafael Grossi, lamentó la aprehensión de los dos trabajadores de la mayor central nuclear de Europa y mostró su esperanza en que la situación se resuelva pronto, según dijo en un comunicado del propio organismo. Agregó que “las repetidas interrupciones a las operaciones de la planta demuestran lo precaria que sigue siendo la situación de la seguridad nuclear".
El servicio de ferry se reinicia a través del Estrecho de Kerch, mientras que los cohetes rusos matan al menos a 17 personas en la ciudad ucraniana.
Autoridades locales señalaron que ha habido “otro ataque enemigo” contra un edificio residencial, aunque por el momento no se ha informado del número de víctimas. “¡Otro ataque enemigo! ¡Quédense en los refugios! El enemigo continúa aterrorizando la ciudad”, alertaron por las redes sociales.
El Organismo Internacional de Energía Atómica, perteneciente a las Naciones Unidas, dijo que la línea de 750 kilovoltios fue reconectada a la planta de Zaporiyia después de que ingenieros ucranianos realizaran labores de reparación. El director general del OIEA, Rafael Grossi, tuiteó que la reconexión fue “un respiro temporal en una situación que sigue siendo insostenible”.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) describe la reanudación de las hostilidades como "tremendamente irresponsable" y seguirá negociando una "zona de seguridad" en el radio de la planta.
El jefe de la AIEA, Rafael Grossi, se reunió con el Presidente Volodymyr Zelensky mientras misiles rusos atacaban la ciudad de Zaporiyia, matando a una persona.
La planta de Zaporiyia se ha convertido en uno de los focos más preocupantes de la invasión rusa. La ucraniana Energoatom declaró que la empresa podría reiniciar dos de los reactores en cuestión de días para proteger los dispositivos de seguridad con vistas al invierno. “Si hay bajas temperaturas, se congelará todo lo que hay en el interior. Los dispositivos de seguridad se dañarán”, especificó.
Desde el Ministerio de Exteriores ucraniano, condenaron “en los términos más enérgicos” la “detención ilegal de Murashov”.