“La tarea que tiene el partido es usar las reformas de Gabriel Boric como un contrapeso de fuerza. Exigirle al señor Boric que ejerza su liderazgo dentro de la Convención, y si no, no aprobarle sus reformas”.

Las palabras corresponden al secretario general de RN, el diputado Diego Schalper, y son parte de un enérgico discurso que entregó ayer en la noche en un encuentro en el hotel Hotel Best Western Premier Marina (Las Condes), con dirigentes, parlamentarios y convencionales del partido.

“Y eso lo entienden perfectamente los socialistas, porque ya hemos estado conversando con ellos y créanme que ellos sí van a ejercer su poder y ya le han notificado al señor Boric que no van a avanzar, ni en las 40 horas ni en la reforma X si es que no modera a la Convención”, continuó diciendo Schalper en su alocución, que se alargó por cerca de siete minutos y a la cual tuvo acceso La Tercera.

La cita, que se extendió hasta la medianoche, buscaba organizar a la colectividad de cara a los meses de trabajo que le restan a la Convención Constituyente y ad portas de que asuma Gabriel Boric la Presidencia de la República.

Esto, en un contexto en que Chile Vamos ha reconocido, en privado, su irrelevancia en el proceso constituyente, debido a que no cuentan ni siquiera con un tercio de los convencionales y han acusado a la oposición de marginarlos en la aprobación de las normas.

En ese marco, Schalper esbozó la estrategia que debe adoptar RN para enfrentar los meses que siguen. De hecho, partió diciendo que “la directiva tenía un dilema, que es el dilema de hablar o no hablar. Si hablamos quemamos la posición, si no hablamos nos critican que no hablamos. Entonces al final es un dilema en el cual vamos a estar permanentemente. Mi impresión es que aquí nos guste o no nos guste, vamos a tener que estar a la cola de otros que van a tener que asumir la primera línea”.

Así planteó en una alocución que tuvo una gran acogida de los presentes, que “hoy día hablar de la estrategia del plebiscito de salida es un error, porque nos van a endosar que estamos queriendo boicotear la Convención. Y ya lo empezaron a hacer desde un comienzo, la Convención se defiende y blablablá. Hay que despejar ese tema (...). El dilema es cómo convencemos, pero cuando llegamos a la hora nona entendamos que si se toma una definición colectiva obviamente esa definición colectiva es vinculante”.

En ese sentido, sostuvo que “creo que hay que quitarle fuerza moral a la Convención. ¿Cómo se le quita fuerza moral? Contándole a la gente que todas las iniciativas populares de normas habrán discutido en promedio una hora las comisiones. Se han juntado 50 mil firmas para terminar durando una hora de conversación. Eso le quita fuerza moral, porque ellos dicen que son participativos. Hablando de la consulta indígena, hablando de esto que me acaba de decir Roberto Vega, que tienen un minuto para exponer. ¿Cómo ponemos eso en conocimiento de la gente para quitarle fuerza moral?”.

De esta forma, el secretario general dijo que había que hacerle frente a la Convención. “Tenemos que hacer competir a la Convención Constitucional con el Parlamento Constitucional. ¿Cómo? Con una alternativa, y nuestra alternativa no puede ser del partido ni de la derecha. Tiene que ser una alternativa mayoritaria y eso se llama el proyecto de Michelle Bachelet. Fíjense la locura. Va a aparecer la centroderecha empujando el proyecto de Michelle Bachelet”, manifestó, agregando que “y no solo el proyecto de Bachelet, sino que, además, una reforma constitucional que cambie ´Apruebo´ y ´Rechazo´por ´Sí´y ´No´. Y eso es una cosa que tenemos que empujar, para que la discusión no sea si aprobamos o rechazamos. ¿Se fijan? Porque o si no, vamos a clavarnos con una marca que, se los puedo decir en carne propia, ya perdió. En cambio, es muy distinta que la marca del 11 de septiembre la nuestra sea el No”.

Schalper, además, manifestó que “este partido, más que nunca, tiene que hacer oposición con todo, y dejarse caer los primeros tres días donde el ministro de Trabajo de Boric y decirle ´ya poh, ¿no éramos tan ágiles? ¿Dónde están las capacitaciones?´ Empezar a atrofiar. Yo sé que quizás la idea de los gabinetes en las sombras fue un poquito incomprendida si ustedes quieren, pero lo que hay detrás es ponerle presión al gobierno de Boric para que cumpla las expectativas sociales, que va a resultar con derechos sociales universales, porque o si no no vamos a tener ninguna capacidad de competir contra eso en septiembre”.

Sobre esa misma idea, el diputado reconoció que respecto de los derechos sociales, “nosotros no tenemos cómo competir contra el derecho de la vivienda gratuita y universal. De ninguna manera, salvo que aterricemos los primeros 100 días de Boric exigiéndole que le cumpla a la gente con los campamentos”, añadiendo que la idea “es presionar desde el Congreso y desde el partido a que Boric cumpla sus promesas y que no venda humo (...), o si no, no vamos a tener ninguna capacidad de competir contra eso en septiembre. Yo no tengo ninguna duda que si el dilema es votar que sí al derecho a la vivienda, y votar que no es no tener derecho a la vivienda, no tengo cómo ganar”.

En ese sentido, Schalper concluyó: “Por lo tanto, yo tengo que haber, perdóneme el francés doctora (María Luisa) Cordero, me... la cancha un poquito antes”.

Junio/julio como plazo

Por su parte, Chahuán en su discurso planteó que la duda está en cuándo “debiera el partido tomar una definición respecto del plebiscito de salida. Y, por lo mismo, lo que ha conversado esta directiva con nuestros convencionales es que nosotros no podemos adelantar opinión mientras no tengamos texto. Porque no podemos deslegitimar cuando fuimos parte de un proceso electoral que eligió convencionales constituyentes”.

Así, añadió que “tenemos que ser una situación intermedia entre evitar una ausencia de preocupación respecto de los textos que han sido aprobados, pero por otra no quitarle el peso al esfuerzo que han estado haciendo nuestros convencionales constituyentes, porque sería deslegitimarlo, sacarle el piso y además se devolvería como un boomerang, porque podría que el resultado final fuera una responsabilidad, según la izquierda, de nuestra acción de finalmente trabajar por adelantar una decisión que todavía no tenemos un texto con el cual definirnos”.

Eso sí, agregó que “respecto de los timmings, a nuestro juicio, el partido debiera tomar definición más allá de mayo, estamos hablando de junio, julio, pero eso no quita que nosotros no estemos preparándonos respecto de manifestar preocupación de aquellas normas que se han ido aprobando”.

En esa, preparándose para el plebiscito de salida, Chahuán agregó que “hemos hablado con el mundo académico. Están trabajando en un texto alterno, lo hemos conversado con Cristián (Monckeberg), y que dice relación que cualquiera sea la opción que adoptemos en el futuro, tenemos que ir trabajando para que todas las propuestas sean presentadas y también ojalá sean debatidas y que “lo que viene adelante es una labor pedagógica de información a la opinión pública respecto de lo que se está aprobando en la Convención”.

Como sea, en la directiva RN transmiten que hay un sentimiento de desazón respecto de la Convención y, por lo mismo, el objetivo es pasar a la ofensiva, porque están convencidos de que en la centroizquierda no están con los ánimos de construir acuerdos y, por lo mismo, no pueden quedarse inmóviles.

Así, dentro de los temas que quieren emplazar al futuro gobierno de Boric es respecto de las certezas institucionales para impulsar una reforma tributaria, donde recalcan necesitarán a la derecha. Asimismo, plantean que también se pondrán duros para pedir que cumpla compromisos en temas sociales, por ejemplo, en vivienda, salud, endeudamiento estudiantil, obras públicas y tema de pensiones de alimentos.