Keanu Reeves lleva al límite al Porsche Taycan en el documental Going the Distance

El mundo del espectáculo tiene una serie de reconocidos amantes del automovilismo. Uno de los más famosos es Keanu Reeves, quien incluso llegó a fundar Arch Motorcycles, su propia marca de motos.

Aquel proyecto nació precisamente por la pasión que tiene el actor por la velocidad. Y esa idea empezó cuando años atrás intentaba personalizar una de sus motos, una Harley-Davidson, con Gard Hollinger, un famoso personalizador de motocicletas en Los Ángeles. Pero su amigo no quiso hacer el trabajo y le dijo que “las Harley no eran su estilo”.

Así comenzó la idea de Arch Motorcycle Company, cuyo primer fue la deportiva KRGT-1. Hoy, el destino motor de Keanu Reeves lo baja de las dos ruedas y lo lleva a un nuevo proyecto audiovisual, esta vez al mando de un Porsche Taycan en un viaje por la autopista del Pacífico hasta el Porsche Experience Center de Los Ángeles.

El documental llamado “Going the Distance” junta a dos amigos, Keanu Reeves y Alex Winter, quienes son fanáticos de la marca. Ambos emprenden una travesía por carretera en el sur de California, donde se pone a prueba sus nervios, su habilidad y las capacidades del nuevo Porsche Taycan Turbo.

Además, de los dos protagonistas, se suman a lo largo del camino invitados especiales que plantean una serie de retos que llevan al límite a los dos actores de Hollywood, siempre en escenarios cerrados al tráfico.

Uno de los invitados es el piloto y especialista de cine Tanner Foust, para dar a Reeves y Winter la oportunidad de experimentar la emoción del sistema de arranque Launch Control en un Taycan Turbo.

Luego, los dos aceptan el desafío del piloto oficial de Porsche Patrick Long: una subida de 3,2 kilómetros por la autopista de la costa del Pacífico siguiendo a un 918 Spyder.

Y como si el día no hubiese sido lo suficientemente bueno, completan la jornada en el circuito del Porsche Experience Center de Los Ángeles, donde intentan batir el récord de drifting del Taycan. Estas pruebas se realizaron en circuitos cerrados y con la supervisión de pilotos profesionales.

El corto tiene una extensión de ocho minutos de duración y debutó en el canal de Porsche en YouTube.