EE.UU. deporta a Colombia a "Sonia", la primera guerrillera de la FARC extraditada
La ex guerrillera cumplió una condena de once años de prisión por narcotráfico en Estados Unidos en 2007 por un tribunal de Washington.
Las autoridades de Colombia detuvieron en el aeropuerto El Dorado, de Bogotá, a la guerrillera de las FARC Anayibe Rojas Valderrama, alias "Sonia", quien fue deportada desde Estados Unidos en donde cumplió una pena de once años de prisión por narcotráfico.
Así lo informó hoy en un comunicado Migración Colombia, que detalló que "tras su llegada al país y luego de adelantar los procedimientos de control y verificación pertinentes" se notificó a "Anayibe Rojas Valderrama de una orden de captura de su contra por el delito de lavado de activos".
La ex guerrillera fue excarcelada el 17 de agosto tras pasar once años en prisión en virtud de una condena impuesta en 2007 en un tribunal federal de Washington por cargos de narcotráfico, indicó en su momento a EFE su abogada, Carmen Hernández.
Migración Colombia añadió que pondrá a alias "Sonia" a "disposición de las autoridades competentes para que responda por los delitos que se le imputan".
La ex guerrillera, también identificada como Omaira Rojas Cabrera y con veinte años de experiencia en la guerrilla, se convirtió en la primera mujer de las FARC extraditada a EE.UU. cuando era considerada la de más alto rango dentro de la organización al ser responsable de finanzas del bloque sur en Colombia.
Sonia, de 51 años, fue arrestada en Caquetá (Colombia) en 2004, cuando portaba armas, dinero y 40 kilogramos de cocaína, y fue acusada de participar en el envío de 600 toneladas de esa droga a EE.UU.
En septiembre de ese año, un juez de Caquetá (sur) la condenó a seis años de prisión por sus actividades en las FARC y al considerarla culpable de rebelión.
En 2005 "Sonia" fue extraditada a EE.UU., donde el magistrado que llevó su caso la señaló como supervisora de una actividad de narcotráfico que incluyó el transporte de al menos 150 kilogramos de cocaína a este país empleando un avión no comercial, con lo que podría haber recibido una condena de por vida, que no obstante se prohibía explícitamente en el acuerdo de extradición.
La ex guerrillera fue sentenciada finalmente a 16 años de prisión, muy por debajo de lo que solicitaba la fiscalía, parte de los cuales ha cumplido en un presidio de Texas y ahora deberá esperar a ver si se le ampara en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).
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