El ánimo empresarial en Alemania trepó inesperadamente en noviembre por primera vez en casi seis meses, lo que sugiere que la mayor economía de Europa está capeando la crisis de deuda en la zona euro y la agitación en los mercados mejor que lo que se había previsto.

El centro de estudios Ifo, con sede en Múnich, dijo que su índice de confianza empresarial, basado en un sondeo mensual a unas 7.000 compañías, subió a 106,6 en noviembre desde 106,4 en octubre. Este es el primer avance del indicador desde junio.

La decepción por la subasta de deuda alemana del miércoles, que no logró recaudar el objetivo fijado por la tesorería germana, despertó temores a que la crisis soberana se esté extendiendo al motor de Europa, pero el índice no confirmó estos miedos e impulsó al euro y a las bolsas europeas.

El economista del Ifo Klaus Abberger dijo a Reuters que el índice de noviembre mostró que la crisis de deuda aún no ha alcanzado a la economía real de Alemania y que el país tenía posibilidades de escapar a la recesión este invierno boreal, con una demanda doméstica estable.

"Habrá una desaceleración, pero no dramática. No estamos en caída libre", aseguró Abberger.