Rafael Maureira Trujillo, alias "Zacarach", está condenado a cadena perpetua por abusar sexualmente de varios menores de edad. Ese caso dejó dando vueltas en el Parlamento la necesidad de hacer algo más para prevenir que hechos como este sucedan. Y así, ayer se promulgó la ley que establece inhabilidades para las personas que han sido condenadas por delitos sexuales contra menores, y que además crea un registro nacional que podrá ser consultado por padres y apoderados, siendo esta consulta obligatoria en el caso de los establecimientos que trabajan con niños.

Sin embargo, este registro está lejos de ser tan estricto como en Estados Unidos, que endureció la legislación contra abusadores sexuales con "La Ley Megan", luego de que en 1994, Megan Kanka, una niña de sólo siete años fuera asesinada en Nueva Jersey por Jesse Timmendequas, un delincuente sexual que ya tenía condenas por delitos sexuales.

La Ley Megan contempla que las policías hagan pública la información sobre los delincuentes sexuales registrados. Sin embargo, cada estado decide la forma de cómo debe ser difundida y la información que llevará este registro. Generalmente, se incluye sobre el nombre del delincuente, la foto, la dirección, el día de decretada la condena y el delito.

La forma de cómo se publica, se hace a través de páginas web oficial de cada estado, medios de comunicación, y panfletos.

La ley chilena indica que el Registro Civil se limitará a informar si a la fecha de la solicitud la persona por quien se consulta se encuentra afecta a alguna de las inhabilidades del artículo 39 bis del Código Penal y omitirá proporcionar todo otro dato o antecedente que conste en el registro.
En tanto, para acceder a dicha información, el solicitante deberá ingresar o suministrar el nombre y el RUT de la persona cuya consulta se efectúa.

Por otro lado, la ley en Estados Unidos ordena que las personas condenadas por delitos de abusos sexuales contra menores, deben informar de cambios en sus trabajos, domicilios, cuando quedan en libertar tras cumplir su condena.

A pesar de la dura legislación, Estados Unidos es el país que mayor cantidad de sitios de pedofilia registra. La nueva ley norteamericana indica que se condena por un solo delito a prisión sin libertad condicional a los ofensores sexuales más peligrosos, aumentó las sentencias a los crímenes sexuales en los que se empleó la fuerza y limita la libertad condicional para aquellos que hayan atacado a menores de 14 años.

La nueva norma también prohíbe a los abusadores el acceso a parques y hace públicos obligatoriamente sus evaluaciones psicológicas, que deberán ser publicadas según la ley Megan. Además el estado debe elaborar un modelo de prevención y evaluación del riesgo de depredadores sexuales.