Una de las promesas de campaña del Presidente Gabriel Boric se comenzó a materializar en la recta final de su administración. El viernes 23 de mayo, desde La Moneda, la ministra de la Mujer, Antonia Orellana anunció el proyecto de aborto legal, y pese a que destacó que significa cumplir con la palabra empeñada, de todas formas lamentó la tardanza del proyecto.

Sin profundizar en detalles, la jefa de la cartera explicó que la iniciativa será ingresada a la Cámara de Diputados durante esta semana. Tras el anuncio, el líder de la testera, José Miguel Castro (RN) adelantó su rechazó a legislar sobre la despenalización de la interrupción del embarazo.

Este lunes en conversación con Radio Cooperativa advirtió que no pondrá en tabla ni citará sesiones especiales para debatir el proyecto.

“No voy a andar haciendo sesiones especiales -que es lo que está dentro de mis potestades- o poniéndolo en tabla, tratando de sacar algunos proyectos de seguridad o de economía para poner esto otro. Que se quede esperando el sueño de los justos si es que es necesario, porque para mí no es prioridad, y siento que para los chilenos tampoco”, indicó.

Castro precisó que “si tiene urgencia, obviamente se va a poner en tabla, aunque creo que el espacio que existe hoy en día en la Cámara -y en el Senado para qué decir- es muy poco, debido a que estamos en otra“.

En esa línea, el presidente de la Cámara criticó que se presente el proyecto en medio de casos como ProCultura y Democracia Viva, además, añadió: “Hay una serie de consideraciones en términos económicos que también tenemos que sacar adelante o el ingreso clandestino como delito. Proyectos que son realmente importantes. Creo que esto es más bien una arenga a ese voto duro de la izquierda desde el gobierno, que le cuesta moverse, y es en términos electorales”.