Delta Air Lines recorta en 50% sueldos de sus ejecutivos y proyecta desplome de sus ventas

Drásticas medidas continúa tomando Delta Air Lines, la aerolínea que el año pasado adquirió el 20% de la propiedad de Latam, en medio del complejo escenario por el cual atraviesa la industria aérea debido al coronavirus.

La compañía estimó que sus ingresos disminuirán en unos US$2 mil millones en marzo en relación con el año pasado, debido a la significativa disminución de la demanda, luego que el gobierno de ese país declarara emergencia nacional. Para abril, dijo su CEO Ed Bastian, proyectan una caída aún mayor.

Por ello, la aerolínea estadounidense reducirá en un 70% su capacidad total, hasta que la demanda comience a recuperarse. Bastian explicó que su operación internacional es que la que sufrirá una mayor reducción, de más de 80% en sus vuelos durante los próximos dos a tres meses.

“Estamos teniendo conversaciones constructivas con la Casa Blanca y el Congreso, y seguimos siendo optimistas de que nuestra industria recibirá apoyo para ayudar a abordar esta crisis”, señaló.

Mientras tanto, indicó la empresa, implementarán otras medidas que ayuden a preservar el efectivo de la compañía, que hoy es su prioridad financiera. Por ello, tomaron una serie decisiones que les permitirá contar con recursos para recuperarse de la crisis y proteger el futuro de la firma.

Entre estas medidas, decidieron recortar en un 50% los sueldos de todos los ejecutivos de Delta hasta el 30 de junio y en un 25% la remuneración de los directores durante el mismo periodo. La junta directiva, por su parte, renunció a su compensación durante los próximos seis meses. La semana pasada, Bastian anunció que renunció a su sueldo por seis meses.

En paralelo, se aplazarán una serie de gastos, entre ellos las entregas de aviones nuevos, hasta que tener mayor claridad de la gravedad de la situación.

Por otra parte, reducirán el tamaño de su flota activa, y mantendrán aparcados al menos la mitad de sus aviones, unas 600 aeronaves.