Más azul que nunca

Un océano más caliente no solo posee más volumen que produce más marejadas y otros eventos destructivos, sino que se evapora más lo que causa lluvias y tormentas más extremas, pero un océano más caliente posee además menos oxígeno y por ende es menos productivo, es decir menos peces y vida en el mar en general.


Existen muchas preguntas respecto del cambio climático, pero sin duda existe también mucha información que es contundente. Es un momento importante, sino el más importante de la humanidad respecto de nuestra huella. Hemos modificado la atmósfera y estamos modificando la fuente de la vida en el planeta, los océanos.

Nueva información sigue apareciendo, solo estos días supimos que los océanos se calientan más rápido de los que pensábamos. Esto es particularmente grave. Como decía un reconocido documentalista, si tuviéramos dos grados más de temperatura en nuestro cuerpo, es decir fiebre cercana a los 40 grados, no podríamos sobrevivir con ella por un periodo sostenido. Lo mismo le sucede al océano o, más bien, a las especies que no pueden moverse a lugares de menor temperatura.

Un océano más caliente no solo posee más volumen que produce más marejadas y otros eventos destructivos, sino que se evapora más lo que causa lluvias y tormentas más extremas, pero un océano más caliente posee además menos oxígeno y por ende es menos productivo, es decir menos peces y vida en el mar en general. El océano absorbe el 90% del exceso de calor de la atmósfera, pero hasta cuando, científicos piensan que podríamos llegar a un punto donde no pueda recibir más este exceso de temperatura y que por ende siga aumentando la de la atmósfera.

El océano es además posiblemente el mayor absorbente del dióxido de carbono, cuestión que está llevando a la disminución del pH del océano, es decir, su acidificación. Esta acidificación tiene un impacto directo sobre los organismos que dependen de exo-esqueleto o de concha, las cuales son formadas con fijación de calcio, en un océano más ácido eso es más difícil pues las disuelve. Con todo ello, seguimos luchando por disminuir el nivel de dióxido de carbono, que las actividades industriales, transporte y energía están poniendo en la atmósfera a niveles nunca antes vistos.

Se requiere una acción concertada de los gobernantes de todo el mundo. Chile tiene además una tarea importante de traer a esta discusión el rol de los océanos en el calentamiento global. El panel de expertos de océanos y cambio climático entregara sus resultados en septiembre y esperamos que sus recomendaciones sean incorporadas en las negociaciones, las cuales se llevaran principalmente a cabo en Chile en enero del 2020.

El Presidente Piñera ha denominado a esta CoP25 (Conferencia de las Partes, más grande de las Naciones Unidad, por razones obvias) la CoP Azul. Chile ha protegido 42% de su zona económica exclusiva y además impulsa la creación de más de ellas en la Antártica. Chile está posicionado como ningún país, de manera que pueda salvar estas negociaciones y salvar el planeta, una tarea dantesca pero vital para la humanidad.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.