No hay garantías de que un ejecutivo comandado por Barnier consiga que las reformas sean aprobadas por un Parlamento dividido.
Elizabeth Pineau y Ingrid Melander/Reuters
5 sep 2024 09:19 AM
No hay garantías de que un ejecutivo comandado por Barnier consiga que las reformas sean aprobadas por un Parlamento dividido.
Con miras a las elecciones generales de este jueves en Reino Unido, donde se renuevan los 650 escaños del Parlamento, se espera una victoria aplastante del Partido Laborista, favorecida por una división entre derecha y extrema derecha.
Mientras Agrupación Nacional, de Marine Le Pen, se prepara para una posible cohabitación política tras las legislativas anticipadas por Macron, el partido Reforma UK, de Nigel Farage, se encamina a robarle votos al Partido Conservador con una retórica antiinmigrante y soberanista. Eso, además del esperado retorno del laborismo al poder en Reino Unido.
El líder del partido Reforma UK anunció que se presentará como candidato a parlamentario y desde entonces remeció la política británica. No solo ha subido en las encuestas, superando a los tories, sino que amenaza con dividir el voto de derecha en las elecciones del 4 de julio.
El político populista da por hecha la victoria de los laboristas y aspira a superar al Partido Conservador. "Seremos la voz de la oposición", asegura.
La medida del premier británico Rishi Sunak ha sido duramente criticada, ya que refuerza las normas antiinmigración en el país y limita la mano de obra disponible en estos recintos, que están quedándose con cada vez menos camareros y cocineros “auténticos” de Italia. A su vez, los jefes de los negocios consideran que los empleados locales “no son tan buenos”.
El aumento de los salarios y la escasez de personal en EE.UU. incitan a las empresas a mirar al otro lado del charco. El salario promedio de un desarrollador de software en EE.UU. se aproxima a los US$ 130.000 al año, aunque se acerca a los US$ 175.000 en ciudades como San Francisco y Nueva York. En el Reino Unido, es de unos US$ 66.000.
La salida del Reino Unido de la Unión Europea le significó un impacto negativo a la industria financiera británica, según la mirada de la propia industria.
Para el fundador de la encuesta Cadem, que este mes cumple sus 500 ediciones y casi 10 años de trabajo, actualmente “las personas están más difíciles” y hay bolsones de votos más ocultos, lo que dificulta el trabajo de medición de la opinión pública. “Te lo reflejo de la siguiente manera”, dice: “Antes los encuestadores teníamos claro con un año de anticipación quién iba a ser el próximo Presidente de Chile. El único que no partió ganando en las encuestas es Gabriel Boric”.
En sondeo de YouGov, el 55% dijo que votaría por volver a la UE, frente al 31% que manifestó que se quedaría fuera, si hoy se celebrara un referéndum.
El sondeo tuvo lugar días después de que el antiguo líder del Partido por la Independencia del Reino Unido y del Brexit, Nigel Farage, criticara el manejo por parte del Gobierno, afirmando que el plan de abandonar la UE había fracasado y que la economía “no se ha beneficiado”.
El acuerdo podría resolver potencialmente el problema de las importaciones y los controles fronterizos en la región, uno de los aspectos más desafiantes y controvertidos de la separación de Londres de Bruselas.
Pandemia, Brexit y gobiernos conservadores mediante, el Servicio Nacional de Salud británico enfrenta problemas para responder a la demanda de los usuarios. En el último año, casi medio millón de personas tomó algún tipo de seguro privado, sumándose a los ya ocho millones de clientes del sector. Ya se habla de un sistema sanitario de dos niveles.
Una encuesta de YouGov reveló que solo el 32% de los británicos cree que fue correcto abandonar la Unión Europea, mientras que el 56% piensa que estuvo mal. Se trata de la brecha más grande hasta ahora y marca un gran cambio en la opinión, particularmente desde junio de 2021.
El exprimer ministro británico visitó Chile para participar del décimo aniversario del fondo de inversión Picton, en el que se refirió a distintos aspectos de su mandato, que se extendió desde 2010 hasta 2016.