Convergencia Social, de duelo: cómo el partido de Boric intentó hasta última hora retener a Meza y Ríos

La exministra de Justicia llegó ayer hasta un encuentro de su partido, Convergencia Social, para "despedirse" de su cargo y recibir palabras de apoyo del resto de autoridades de CS. La definición de Boric respecto de dos militantes de su partido no ha sido fácil para la colectividad, quienes hasta el final defendieron internamente que tanto Ríos como Meza-Lopehandía permanecieran en el gobierno.


“El 2023 ha sido muy difícil para el gobierno (risas). Para ser bien franco, es un día doloroso. Y hago la salvedad personal, porque tengo cercanía personal y política con las dos personas que renunciaron. La exministra Ríos es militante de Convergencia Social y Matías Meza es de este mundo de hace muchísimos años, es un referente político-intelectual para muchos de nosotros”.

Las sentidas palabras del diputado Gonzalo Winter al iniciar el domingo su participación en el programa Mesa Central reflejan el estado de ánimo que predominó en el partido del Presidente Gabriel Boric durante la semana pasada y que se agudizó el fin de semana: desazón.

La salida de Marcela Ríos en Justicia y del jefe de gabinete y amigo del Mandatario, Matías Meza-Lopehandía -luego de que el mismo jefe de Estado acusara “desprolijidades” en su decisión de otorgar los indultos-, propinó un duro golpe a Convergencia Social, partido que verá -por ahora- mermada su participación en el comité político y en una cartera sindicada como “clave” para la agenda de Apruebo Dignidad.

Este domingo, la directiva y las autoridades de la colectividad (ministros, subsecretarios, alcaldes y parlamentarios) dirigida por el diputado Diego Ibáñez se reunieron en una jornada que tenían planificada con antelación, pero donde la salida del gobierno de ambos militantes fue un tema obligado. Es más: el espacio contó con la presencia de Ríos. Según asistentes, su partido le ofreció una sentida despedida en que agradecieron el trabajo que hizo durante los últimos 10 meses.

En los días previos a la definición de Boric, el partido optó por defender a la extitular de Justicia a rajatabla, con gestos públicos y privados de respaldo. Fue así que el lunes de la semana pasada, ya desatada la crisis política por los indultos presidenciales, la socióloga se reunió con parte de la directiva de Convergencia Social el lunes.

Respaldamos con firme convicción a la ministra Marcela Ríos, quien, llevando adelante el mandato del Presidente, ha firmado los decretos de indulto”, declararon tras la cita en la que participaron la vicepresidenta Ximena Peralta, las diputadas Gael Yeomans y Emilia Schneider, entre otros dirigentes. Tres días después, almorzó con diputados de distintas bancadas oficialistas en Valparaíso, en una cita que solicitó el equipo de Ríos para abordar la agenda legislativa de su cartera y también hacer reflexiones sobre sus turbulentos días.

Con el pasar de las jornadas, y al asomar las responsabilidades políticas del error en los indultos -en particular en los de Luis Castillo y Sebastián Montenegro-, la colectividad no cejaba en la idea de mantener a Ríos a como dé lugar, ejerciendo presión sobre La Moneda, donde la ministra del Interior, Carolina Tohá, fue una de las principales impulsoras de la salida de ambos personeros. “La ministra es un liderazgo fundamental para Convergencia”, transmitían.

Sin embargo, una vez que La Tercera PM reveló que en la “cadena de errores” también estaba implicado el exjefe de gabinete de Boric y militante de CS, el dilema se complicó. Meza-Lopehandía tuvo un rol activo en todo el proceso de selección de los casos y en la interna consideraban complejo hacer valer la responsabilidad política a dos representantes del partido.

Comité central extraordinario

Una vez zanjada por Boric la salida de las dos autoridades, en público, Convergencia respaldó la definición. “El Presidente toma la decisión y hace valer la responsabilidad política, y lo que nos corresponde a nosotros es respetar esa decisión”, señaló ayer Ibáñez. De hecho, tras el comité político ampliado de este lunes, y luego de que el Mandatario terminara la declaración conjunta con el Presidente de Colombia, Gustavo Petro, Ibáñez se acercó y abrazó a Boric.

Presidente Gabriel Boric junto al timonel de Convergencia Social, Diego Ibáñez.

Una de las asistentes a la cita que congregó ayer a la plana mayor de la tienda, la diputada Lorena Fries, relató que si bien lamentaron las bajas, el foco de la reunión fue analizar cómo enfrentarán el resto del año. “Para cualquier partido que saquen a dos militantes que están en espacios importantes es doloroso. Pero también es cierto que el Presidente adoptó la medida frente a los errores cometidos, hizo valer la responsabilidad política y lo apoyamos”, sostuvo la diputada.

“Nos abocamos a mirar hacia adelante, a lo que es 2023, evaluar cómo durante 2022 como gobierno fuimos en ayuda de las personas (...). Lo que hicimos (en la reunión) fue reafirmar un compromiso con las transformaciones que requiere el país”, agregó Fries.

Además, consultada respecto al inminente nombramiento para ocupar el cargo que dejó vacante Meza-Lopehandía, la diputada aseguró que “no fue un tema”. Según dijo, “a Convergencia Social lo que nos importa es avanzar en este proceso. Hay demasiada ‘chimuchina’ por los cargos, pero la Convergencia no es de ese tipo de partido”.

Con todo, el comité central del partido convocó para esta semana a una sesión extraordinaria “para debatir políticamente” los ajustes en La Moneda, señalan en la citación a la militancia.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.