A Daniela Picasso, quien acaba de lanzar su tienda online de regalos de novios (www.losregalos.cl), le encanta almorzar en la terraza. Hace un año que se cambió de departamento a casa y asegura que ese es uno de los lugares que más disfruta y una de las razones determinantes para el gran cambio.

Como la terraza no esmuy grande, tuvo que optar entre poner una mesa o un par sillones. Se decidió por la primera y, gracias a los muebles de terraza de su infancia -los que fueron un regalo de sus padres-, lo convirtió en su lugar ideal. “Esta terraza es lomáximo. La usamos unmontón. El cambio fue muy bueno. Además que el sector esmuy rico, no haymucho ruido y uno se puede relajar al aire libre”, asegura la publicista y periodista de la vida social de la revista Cosas, que esta vez nos sorprendió con “un cebiche, ya que cuando pienso en la terrazame imagino altiro el calor y el verano, comiendo algo fresco.Me encanta prepararlo con choclo peruano, cebolla morada y pimentones. Incluso, a veces, se puede hacer una variación y le echo leche de coco para transformarlo en un plato asiático”.

Como un sibarita de la música. Así se describe Julián García-Reyes, director de la radio Horizonte. Es un hombre ocupado que trabaja hasta tarde, por eso disfruta mucho de los aperitivos y asegura que le sirve para cortar el día y relajarse después de una intensa jornada de trabajo. “Es darse un momento para uno, para no estresarse”, comenta. Por este motivo eligió una terraza que frecuenta mucho, especialmente en el verano. Es la del restaurante Zanzíbar, en Borde Río, que con decoración marroquí, cargada de colores y figuras, se complementa a la perfección con la comida que conjuga distintos sabores exóticos del mundo. “Creo que en Santiago no hay muchas terrazas, a diferencia de Buenos Aires, donde saben utilizar muy bien ese espacio. La del Zanzíbar es ideal para venir cuando hace calor, relajarse en uno de sus sillones, tomarse un trago y comer algo rico. A pesar de la ubicación del lugar, al lado del río Mapocho, creo que se aprovecha bien”, asegura García-Reyes.

La comida elegida, Nems -rollo a base de harina de arroz, rellena de calamar, pollo y camarones envuelto en lechuga con salsa agridulce-, contrasta con la simpleza de la que acostumbra a comer. Por eso mismo le gusta, “éste es uno de esos restaurantes en que lo que pidas es rico. Acá uno prueba muchas cosas nuevas”, concluye. Junto al plato, eligió dos tragos, ambos llevan el nombre del restaurante. Uno tiene vodka, limón y menta, mientras que el otro, más elaborado, está hecho de vodka de grosellas con albahaca.

Un buen pescado en la terraza del Oporto. Ese es el panorama ideal para FranciscoMandiola, chef ejecutivo de este restaurante ubicado en Isidora Goyenechea. Con sólo 33 años, ha dado de qué hablar ganando títulos como Mejor Chef, Chef Revelación y Carta más Transgresora. Hoy es el encargado de crear el menú del Oporto, restaurante que confiesa haber visitado religiosamente casi todos los días durante el verano pasado, cuando aún no trabajaba ahí.

Diseñada por Patricia Vargas y Loreto Hurtado, la terraza del Oporto ofrece un ambiente cálido y cómodo. Eso es lo quemás le gusta a Mandiola. “Me gustan sus distintos ambientes y la iluminación que se crea con los fogones, las velas y las luces bajas”, nos comenta y asegura que “la noche esmi hora de terraza.Me gusta venir después del trabajo a comer algo y a relajarme. Creo que un pescado es la comida ideal para esta situación, es más liviano y menos calórico que las carnes y la pasta”. Por eso, eligió un congrio, con una base de leche de almendras, puré de habas y zapallo italiano grillado y, sobre el pescado, salsa de ostras, polvo de almendras y jengibre.

Mandiola ha pasado varios años asesorando a distintos restaurantes pero asegura que a éste llegó para quedarse. Sólo lleva tresmeses y el cambio ya se nota. Sin embargo, señala que el verdadero cambio viene ahora, cuando estrene la nueva carta de primavera-verano.

En Chile no es muy común, pero en los países anglosajones el brunch es una costumbre cada vez más utilizada. La chef Virginia de María la adoptó en Australia, donde vivió el año pasado y le encanta hacerlo cada vez que se presenta la ocasión.

Virginia nos cuenta que en Sydney lo disfrutaba todos los domingos con sumarido. “El concepto del brunch es muy entretenido. Generalmente, se hace en los días de descanso. Como la gente se levanta más tarde, se topan los horarios del desayuno y del almuerzo. Da la posibilidad de mezclar lo dulce con lo salado y permite combinarlos sin un orden predeterminado. Lo mejor es que da espacio para todo tipo de alimentos”, nos cuenta. Por eso, eligió esta hora para mostrarnos sus preparaciones favoritas: french toasts con compota de berries y una variación de huevos benedictinos -un clásico de cualquier brunch- sobre una brusquetta con espinaca y jamón crudo. Y la terraza, su favorita: la de la casa de su mamá, la misma en que ha estado toda su vida y la que hoy disfruta cada vez que puede. “A mi gusto, ésta es lejos la terraza más linda y creo que tiene mucha vida, se nota por sus plantas. Es muy cálida y se puede usar todo el año. Además, acá están todos mis recuerdos: todas las navidades y los almuerzos que desde niña hicimos en este lugar”.