Había expectación. Llegamos más de 75 mil personas durante los cinco días que el arte revolucionó las calles bonaerenses. Estaban literalmente todos. Artistas, coleccionistas, directores de museos, galeristas, gestores culturales y un público interesado en el tema que acudió en masa a ArteBA 2010. La cita, como siempre, en el gigantesco espacio de La Rural, en pleno Barrio de Palermo, agrupó a la totalidad de las galerías argentinas además de Chile, Colombia, México, Venezuela, Brasil, Estados Unidos, Holanda y Uruguay. Tres fueron los grandes temas: Chile cimentando lo hecho el año anterior con una sólida presencia; la novedosa apuesta que se vio en el Barrio Joven y la celebración del Bicentenario latinoamericano.

:Chile querido: el gran desembarco

La condición impuesta por ArteBA para la edición 2010 de la feria era clara: por enmarcarse en la celebración del Bicentenario las galerías únicamente podrían presentar artistas nacionales. Así, la presencia de las galerías AFA, Animal, Artespacio, Die Ecke Arte Contemporáneo, Florencia Loewenthal, Galería Isabel Aninat, Moro y Sala Cero, además de Trafix y Espacio Lugar, que formaron parte del Barrio Joven, hicieron de esto una oportunidad de presentar sus apuestas nacionales, que se pudieron conectar con la escena local y la producción artística más reciente del continente. Muestra de ello fue lo que hizo AFA, que llegó con Josefina Guilisasti, Francisca Sánchez, Ignacio Gumucio, Joaquín Cociña, Álvaro Oyarzún y Cristóbal Palma. AFA, además de fotos, llevó pintura, escultura, video, instalación y dibujo, al tiempo que destinó unamuralla especialmente para destacar lo nuevo, “nosotros –con el taller Angamos– les dimos un espacio a los jóvenes talentos para que se pudieran exhibir a nivel internacional. Entre ellos Paloma Maturana, José Benmayor, Santiago Salvador y Matías Santa María”, comenta Irene Abujatum, de AFA.

Por su parte, Isabel Aninat exhibió a los consagrados: Roberto Matta, José Gurvich y Matilde Pérez. Aunque también están los jóvenes que han marcado el éxito en el circuito como Pedro Tyler, Catalina Mena y el colectivo Aninat-Swinburn, quienes estuvieron en la Feria de Arte Contemporáneo Latinoamericano Pinta Londres, donde sacaron aplausos de la crítica especializada y lograron la bien ponderada aceptación del público europeo.

La Sala Cero apoyó a los artistas Carlos Gómez, Basco Vazko, Cecilia Avendaño –fenómeno en ventas durante estos días–, Pablo Serra, José Pedro Godoy y Mauricio Garrido. La galería Animal estuvo con Samy Benmayor, Gonzalo Cienfuegos, Hernán Gana y Jorge Tacla, entre otros, y Artespacio fue con Pablo Jansana,AndrésVio,María JoséMir y Francisco Gazitúa,mientras que Florencia Loewenthal tuvo piezas de Alfredo Jaar, Mario Navarro, Carlos Navarrete, Patricio Vogel y Margarita Dittborn. También estuvo interesante la apuesta de Galería Moro, que llevó a Magdalena Atria, Arturo Duclós y Germán Tagle. Finalmente, sala Die Ecke tuvo piezas de Francisca Benítez y Johanna Unzueta, quien fue la ganadora del premiomejor stand individual de la feria Pulse de Nueva York.

¿El resultado? “Definiría la experiencia como otro paso importante en el proceso de internacionalización de nuestro arte contemporáneo. Cada galería chilena desplegó una propuesta particular, siendo muy positivo que no se repitieran artistas entre un stand y otro, lo que revela la diversidad y cantidad de artistas chilenos talentosos con que contamos. También fue positivo ver una fuerte presencia de artistas de media carrera y de artistas jóvenes, lo que otorgó aires de frescura a la presencia chilena”, nos dice Constanza Güell, jefa de Unidad de Asuntos Internacionales del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, a lo que suma diciendo que “ArteBA fue una buen experiencia para nuestro arte en términos de vitrina. Sé de algunos artistas que pudieron cerrar acuerdos con galerías argentinas y de otros que vendieron obras a importantes coleccionistas de Latinoamérica e instituciones como la Fundación Cisneros de Venezuela, lo cual es muy bueno en términos de circulación de obra y de validación. Por último, creo que el mayor logro es la inserción que poco a poco se está construyendo en circuitos latinoamericanos con otras acciones complementarias, como los chilenos invitados a dar conferencias o la distribución del periódico sobre arte contemporáneo chileno El Reyno de Chile”. Con todo, se puede decir que Chile sacó cuentas bastante amables de su participación contando que, luego de Argentina, fuimos el país con mayor presencia en ArteBA, sobrepasando a Brasil y Colombia.

:Celebremos el Bicentenario

Diversidades de trabajos marcaron los pasillos de La Rural. La gran novedad en esta edición con el sello del Bicentenario es la primera edición del concurso Arcos Dorados de Pintura Latinoamericana, donde hay un curador por cada nación para presentar la obra de un solo artista. El seleccionado de Chile fue Gerardo Pulido, junto a Víctor Florido de Argentina, Jaime Gili de Venezuela, Manuel Mathar de México y Beatriz Olano de Colombia.

:El Barrio Joven

Fue por lejos lomás experimental de toda la feria. Acá estaban los dos proyectos independientes chilenos de la Galeria Traffic y Espacio Lugar.Multiplicidad de técnicas y puntos de vista de diferentes localidades de Argentina como Córdoba, Mendoza y San Carlos de Bariloche acompañaron sus propuestas con las de Brasil, Chile, México y Venezuela. Obras que viajaronmiles de kilómetros para estar dentro de esta plataforma que, sin duda, asegura un excelente piso para saltar a lo más grande. Aquí está el ganador del premio En Obra, que distingue a la producción artística emergente dentro de Barrio Joven Chandon, Federico Lamas y su instalación que se llamó Vete Al Diablo.

Aunque los chilenos de Espacio Lugar no se quedaron atrás en materias de innovación. “Acá la gente está superabierta y dispuesta a conocer nuestro trabajo. El proyecto fue armado como un espacio específico que se monta en una feria y que hace de esto una obra que reflexiona sobre la feria como formato de exhibición”, nos comentaron los chilenos Javier González y Rosario Carmona.

Este fue el lugar más visitado por críticos, curadores y coleccionistas que quisieron descubrir la genialidad de los jóvenes artistas quemostraron sus obras y vieron en ArteBA la importancia que tiene esta vidriera para el mundo de las artes.

• El periódico sobre arte chileno RCH, Reyno de Chile, circuló en los días de la feria. Fue desarrollado por el CNCA y DIRAC, y mostró la realidad de nuestro arte y su proyección internacional.