Hace unas semanas viajé a Lima y quedé fascinada. Y no sólo por su exquisita gastronomía -ya de reconocida fama-, sino que además por su decoración y losmercados de artesanía que pude recorrer. Tuve la suerte de entrevistar a una de las diseñadoras más trendy de la capital peruana, antes de que partiera a presentar su colección de accesorios a Colombiamoda.Me refiero a Carolina Restrepo, una colombiana avecindada en Lima hacemás de cinco años y fundadora de la marca Purocorazón, cuyo concepto es mezclar artesanía tradicional con diseños modernos y de impecable factura.

Me contó que el nombre de sumarca es producto del amor. Sí, la idea surgió cuando conoció a sumarido, un belga-colombiano que comenzó a trabajar con un grupo de diestras bordadoras de Ayacucho, víctimas de la violencia intrafamiliar y amparadas bajo una organización gubernamental de Bruselas. De tanto acompañarlo a esa ciudad peruana, se le ocurrió comenzar a mezclar los coloridos diseños tradicionales de las flores de la sierra, con las fajas a telar del Cuzco y los geométricos bordados en punto cruz de las artesanas de la selva, y llevarlos principalmente a accesorios, carteras y bolsos, aunque también ha incursionado en blusas y faldas. En cada una de estas piezas, además, se mezcla de modo magistral todo tipo de materiales: desde lona, lino, algodón, hasta telas sintéticas y plástico. Los resultados hoy se exportan a países como Japón, Francia y otros de Latinoamérica. De hecho, en la semana de la moda de París le ha ido tan bien que este año piensa volver a exponer su nueva colección.

De regreso en Santiago y conmi tan alabada cartera roja con flores de las artesanas de Ayacucho, pensé en las maravillas que se podrían hacer también en Chile con los coloridos bordados de Copiulemu, VIII Región, los de Vichuquén, VII Región, y con las arpilleras de la RegiónMetropolitana -técnica que, a todo esto, abunda también en Perú- combinadas con telaresmapuches y aymaras. Todo depende del diseño y la factura, que debe ser impecable. Artesanía y vanguardia, a esta altura es mucho más que tendencia.