Por Carlos SotoSe acabaron las invitaciones a Coquimbo

Muchas de las reflexiones de José Sulantay, en 1991, me hacen sentido hoy, cuando Coquimbo Unido está a punto de ser campeón del fútbol chileno. Nos decía que si corríamos todos los partidos, estaríamos de la mitad hacia arriba en la tabla. Y así fue. Ese año terminamos segundos, detrás de Colo Colo.
Entre las cosas que sigue reflejando este Coquimbo están la entrega, el correr, el darlo todo. Si tú corres, te ganas al público, a la gente. El equipo actual tiene eso. Todos corren, todos se entregan. Y tienen la otra parte, también: lo futbolístico. Es la combinación perfecta.
En ese tiempo, Coquimbo estaba recién ascendido. Viajamos todo el año en bus, no concentrábamos porque no había plata, la pretemporada la realizamos en La Herradura y hasta hicimos una Piratón para mantener al club a flote. La gente lo quiere mucho. A sus jugadores, también. En el mercado me regalaban el pescado y la fruta. Se refleja claramente el sentido porteño.
Es difícil que Coquimbo juegue un buen fútbol si no corre. En eso, este equipo se parece al nuestro. Teníamos al Heidi González, a Roberto Corro, a Orlando Mondaca y Cristián Olguín. Y atrás, jóvenes como Daniel López y Sergio Rivero. Para ir a El Salvador viajamos en un Hércules al que le pusieron asientos. Empatamos a cero y clasificamos. Y cuando llegamos de vuelta, estaba toda la gente esperándonos. Y nos fuimos en caravana desde La Serena a Coquimbo. En Santiago nunca supieron. Con suerte me llamaron 30 segundos de una radio. Coquimbo pasó a segundo plano, porque venía la liguilla.
Ahí Sulantay se hizo fuerte. Al año siguiente fue campeón con Cobreloa. Usaba el mismo sistema de Mirko Jozic hacía años, con tres centrales y laterales volantes. Buscaba jugadores para el sistema.
La gente tiene que estar ilusionada, orgullosa. Me alegro mucho. A nosotros siempre nos llevan para hacernos homenajes por salir segundos, así que se acabaron las invitaciones a Coquimbo. Y está bien. Es merecido, por lo que han hecho los jugadores, el cuerpo técnico y la dirigencia.
Por Carlos Soto, exjugador histórico de Coquimbo Unido.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
3.
4.



















