La elección interna de Revolución Democrática del 25 y 26 de enero no solo mantiene tensionada a parte de la militancia, sino que también -sostienen algunos- ha afectado la relación de los mismos diputados en el Congreso.

Miembros del partido señalaron que aquellos parlamentarios que apoyan la candidatura de Javiera Parada -Miguel Crispi, Pablo Vidal, Renato Garín y Natalia Castillo- han resentido que la diputada Catalina Pérez, principal rival de Parada, haya llevado "el comando de su campaña interna a Valparaíso", situación que ha generado que las puertas de las oficinas de cada diputado se mantengan cerradas. Algunos ya no se dirigen la palabra e incluso se han evidenciado diferencias en la votación de algunos proyectos.

Quienes respaldan a Pérez -Giorgio Jackson, Maite Orsini, Jorge Brito y el senador Juan Ignacio Latorre- aseguran que no han afectado el trabajo parlamentario y que sus actividades internas las hacen fuera del Congreso.